Para ayudar a CALF, el MPN pide una reforma 2-4-03

NEUQUEN (AN).- El MPN condiciona la discusión de la concesión directa de la cooperativa CALF a la reforma integral de la Constitución provincial, una antigua aspiración política del gobernador Jorge Sobisch. Sin embargo, la oposición advierte que no se dejará presionar. Si la propuesta de exceptuar a CALF de la compulsa pública queda congelada en la Legislatura, la ex Alianza y el PJ en el Concejo, sectores autores de la iniciativa, convocará un referéndum para que la ciudadanía decida sobre la continuidad de la cooperativa como distribuidora del servicio eléctrico. La consulta popular es el segundo escalón de una estrategia a mediano plazo, de fracasar el intento para que los diputados revean la ley de administración financiera incluyendo a las entidades cooperativas de servicios públicos en el régimen general de excepciones a la licitación pública. Es una emienda que abriría al municipio las puertas para renovar la concesión a CALF obviando la licitación ordenada por la justicia. Fue el concejal Federico Brollo, jefe de la bancada emepenista y dirigente muy cercano al gobernador Sobisch, quien ayer puso condiciones al tratamiento del proyecto del ARI, Frente Grande, Justicialismo y del Socialismo. «Posible es posible» -dijo con respecto a la alternativa de adecuar la ley de administración financiera a las nuevas circunstancias- pero «nuestra propuesta (por el MPN) es incorporar cualquier modificación a la reforma constitucional», agregó. Tampoco dio garantías acerca del futuro del proyecto, más allá de la «actitud positiva» de los legisladores del MPN de incluir este «tema dentro de otros temas importantes» en la reforma que persigue el gobierno. «Si se está de acuerdo con renovar la concesión a CALF está al alcance de la mano el proyecto de ley, para eso no hace falta una reforma constitucional», desafió el frentista David Lugones, presidente de la comisión de Servicios Públicos del Deliberante. Del mismo modo, desde el peronismo, el concejal Segundo Záccar descontó el apoyo de su partido a CALF por ser una «entidad popular» e interpretó la embestida del MPN como una excusa para «encajarnos la reducción de los cuerpos legislativos a la mínima expresión». Néstor «Chango» Burgos, presidente del Deliberante, recordó que la UCR planteó en 2001 la necesidad de reforma o enmienda constitucional. Sin embargo, en la nueva coyuntura política, cree en lo personal que debiera revisarse este mandato. «La reducción de los espacios políticos no solucionan los problemas del Estado…», acotó sugestivamente. Con su particular estilo directo, Juan Dutto, presidente del ARI, dijo que «siempre entendimos que una enmienda debería hacerse no por conveniencia política sino por necesidad de la comunidad. Está visto que no son los parámetros que utiliza el MPN para tratar el tema de CALF». Y acotó que «si el MPN ejerce esta presión al pueblo de la ciudad convocaremos un referéndum». Se refería a los proyectos de reforma del gobierno ingresados en los últimos tres años en la Legislatura. En septiembre de 2000 el Ejecutivo presentó la primera propuesta de una seguidilla de tres. Entre los aspectos que generaron polémica figura la reducción de 39 a 19 miembros la Legislatura, de 17 a 9 a los deliberantes de primera categoría, a 5 a los de segunda y a tres a los de tercera con argumentos de supuesta «economía», los que dejan al gobierno libre el camino para adjudicar o prorrogar sin conflictos las áreas petroleras, condicionan los salarios de los jueces y aquellos que profundizan el régimen económico.