Para Mansilla, la Justicia tiene el personal mínimo

El presidente del Superior Tribunal de Justicia, Enrique Mansilla, defendió la estructura administrativa actual del Poder, destacando que “tiene la gente mínima necesaria” e incluso “en algunas áreas se deberá reforzar”. Esa postura coincide con la elaboración del presupuesto para el 2014, que se creía ya podía incorporar reformas, considerando que otros miembros del flamante STJ cuestionan las divisiones administrativas, considerándolas sobredimensionadas frente a las dificultades operativas que registran las estructuras jurisdiccionales. El año pasado, en la audiencia en la que resultó elegido, el juez Sergio Barotto había advertido ese presunto desequilibrio de prioridades. La situación se volvió a repetir en julio último con las exposiciones de los nuevos magistrados. Las mayores críticas fueron de Liliana Piccinini y Adriana Zaratiegui, planteando que la administración debe estar al servicio del Poder sin crecer desmesuradamente frente a lo jurisdiccional. De esta manera, la reforma administrativa se preveía como objetivo inmediato del recién conformado STJ. Sin embargo, Mansilla no comparte esa visión. El sector administrativo “no está sobredimensionado pero existía esa percepción. Tiene la gente mínima necesaria y, además, en algunas áreas hay que reforzar”, afirmó. El presupuesto judicial concluirá este año con una ejecución superior a los 460 millones, con una concentración de un 93% en la partida salarial. En diálogo con FM VyP, Mansilla reafirmó que para el 2014 “se necesitarán en el presupuesto partidas para todos los organismo creados”. “Se necesitan nuevas capacitaciones, infraestructura y más personal. Vamos necesitar una estructura que hoy no tenemos”, indicó antes de detallar que “la prioridad será la cobertura de vacantes”. Al mes agosto, el Poder Judicial había ejecutado 305 millones, de los cuales 283 millones fueron para salarios. El presidente del STJ reconoció el impacto de la masa salarial y, en otro análisis, entendió que hoy el nivel remunerativo de la Justicia “ya no es atractivo”. Consideró que “un profesional prefiere seguir en el ejercicio (privado) antes de llegar un juzgado de instrucción”, que cobra unos 25.000 pesos con 10 años, con la responsabilidad que tiene y el tiempo que requiere. En el marco presupuestario, Mansilla entendió que se deberán incorporar recursos para la fuerte capacitación que requerirá la implementación de la reforma del Código de Procedimiento Penal, previendo que se necesitarán unos dos años para su puesta en marcha. “Su aplicación a partir del 2014 es muy prematura”, opinó. (AV)