Para Sanz, la re-reelección será el debate del 2013

BARILOCHE (AB).- El senador radical Ernesto Sanz vaticinó aquí que todas las fuerzas políticas deberán prepararse para disputar el año próximo una elección legislativa que tendrá como gran tema de debate la reforma de la Constitución para una nueva reelección presidencial. Interpretó que “como le ocurre a todos los populismos”, el gobierno actual “tiene un serio problema con la sucesión” y sólo concibe prorrogar el liderazgo de Cristina Fernández, porque carece de “plan B” Dijo que los alineamientos se darán a favor o en contra de la reelección y advirtió que “detrás de la reforma constitucional hay otras cosas”, porque a su juicio el gobierno pretende eliminar cláusulas que garantizan el federalismo, como la propiedad provincial sobre los recursos naturales. Sanz estuvo la semana pasada en Bariloche por invitación del comité local para participar de la presentación del centro de estudios Convivencia Ciudadana. Fue recibido por la titular del comité, Noemí Sosa, y por los ex intendentes radicales Marcelo Cascón y Atilio Feudal. El senador habló también de la situación que enfrenta la UCR rionegrina, admitió que debe sobreponerse de “un golpe fuerte” como fue la derrota electoral de 2011 y consideró que hará falta “entereza para recuperar al partido”. En cuanto a la revisión de los errores cometidos, dijo desconocer si hubo “autocrítica hacia afuera” por parte de la dirigencia provincial, pero “seguro que sí la hubo hacia adentro”. Sanz evaluó que en el país “existe actualmente un debate político como hace tiempo no lo había, por lo menos en cuanto a la intensidad, aunque no tanto en la profundidad”, ya que muchas veces “no gira sobre la agenda de la sociedad sino sobre la agenda del poder”. Observó que ese debate “está últimamente demasiado centralizado en la disputa del gobierno con Clarín y con la Justicia, que es importante, pero que deja afuera muchas asignaturas pendientes, como son por ejemplo la generación y la asignación de la riqueza”. En relación con las elecciones de 2013 -y luego las presidenciales de 2015, Sanz consideró que el radicalismo debe trabajar en una coalición que incluya al Frente Amplio Progresista y otras fuerzas afines. Aseguró que los que se inclinan por un entendimiento con el PRO de Mauricio Macri o el llamado “radicalismo K” (como el que existe aún en Río Negro) son “sectores minoritarios”.