Paramilitares colombianos se reorganizan y expulsan a los «narcos»

Tras agrupar durante cinco años a los paramilitares, las AUC, con más de 10.000 hombres, se disolvieron ayer, luego de que su jefe político, Carlos Castaño, renunciara a su cargo hace una semana debido, según él, a las acciones criminales de algunas facciones vinculadas al narcotráfico y el secuestro.

De las AUC (dirigidas por 9 comandantes) se separaron las Autodefensas Campesinas de Córdoba, Urabá y Casanare, además del bloque Tolima (centro). El anuncio de la creación del MONA -realizado ayer por los máximos jefes paramilitares de Colombia, los comandantes Carlos Castaño y Salvatore Mancuso-, ocurrió en sintonía con un importante gesto del Congreso estadounidense.

En la Comisión de Conciliación del Congreso de los Estados Unidos fue aprobada esta semana una autorización para que el dinero entregado a las fuerzas armadas colombianas para la lucha contra el narcotráfico, pueda utilizarse también para la lucha contra los grupos insurgentes y los paramilitares.

Ataque rebelde

Rebeldes de las FARC activaron esta madrugada un «caballo bomba» en la localidad de Guadalupe, en el noroeste de Colombia, causando heridas a ocho personas y graves destrozos en una veintena de viviendas, informó la Policía.

El coronel Luis Moore, jefe encargado de la Policía en el departamento de Antioquia, señaló a la prensa que el ataque estaba dirigido contra el cuartel de ese municipio. Según el oficial, un comando de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia ) instaló una potente bomba en el lomo de un caballo, detonándola luego al paso de éste por un sector aledaño a la estación de Policía.

Foto: Los paramilitares colombianos quieren dar una imagen más «respetable» ante EE. UU.