Paso gigante de Alianza rumbo al ascenso
La Fusión derrotó a Huracán y está cerca de conseguir su lugar en la final de la B.
Alianza Viedma cortó el maleficio de no poder ganar en Trelew y con la victoria de anoche sobre Huracán, por 90 a 86 (41-40), dio un paso clave en su aspiración de meterse en la final que determinará un ascenso en la Liga Nacional B de básquet. Ahora el elenco rionegrino está 1-0 en la serie de semifinales y tiene dos juegos en casa para definirla a su favor. La buena cantidad de público que acompañó a la Fusión a la ciudad chubutense, festejó junto al plantel esta importante conquista, ya que fue la primera vez que venció al Globo en calidad de visitante. Defensa dura y buena selección de lanzamientos fue la fórmula que le permitió a los viedmenses irse arriba en los primeros minutos del pleito en Trelew. El 17-11 era justificado, con un gran trabajo de Lucas Bianco en el goleo desde el perímetro. Pero Bernardo Murphy movió el banco, hizo ingresar a Walter Cordero y los aciertos de éste, más los altos porcentajes de Martín Aguirrezabala, le permitieron al local clausurar los primeros diez minutos con ventaja: 26-25. Nuevamente la Fusión fue más en los primeros pasajes del segundo tramo. Se puso 36-30 y dominaba el desarrollo. Esta vez fue Ramiro Heinrich el que saltó desde la banca y le cambió la cara al Globo, en contraposición con un Alejandro Papalardi que estuvo muy errático y no pesó como otras noches en la zona pintada. Otra vez emparejó las cifras Huracán y así se mantuvo hasta la chicharra final. Fue Facundo Brizuela, de buena tarea, el que con un doble puso la mínima diferencia para la visita antes del descanso (41-40). En el tercer cuarto se inició el despegue de Alianza en el tanteador. Si bien en otros tramos del encuentro había conseguido diferencias, en esta ocasión supo como mantenerla. A lo hecho por Lucas Bianco se sumaron en estos períodos definitorios Mauricio Beltramella, responsable de un par de triples valiosos y Héctor Martiarena, que hizo sentir su potencia. Una vez que Alianza logró poner una luz y mantenerla, jugó con la desesperación de Huracán, que reaccionó hasta llegar a cuatro puntos abajo, pero al que le pesó la obligación de mantener la localía.
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Alianza Viedma cortó el maleficio de no poder ganar en Trelew y con la victoria de anoche sobre Huracán, por 90 a 86 (41-40), dio un paso clave en su aspiración de meterse en la final que determinará un ascenso en la Liga Nacional B de básquet. Ahora el elenco rionegrino está 1-0 en la serie de semifinales y tiene dos juegos en casa para definirla a su favor. La buena cantidad de público que acompañó a la Fusión a la ciudad chubutense, festejó junto al plantel esta importante conquista, ya que fue la primera vez que venció al Globo en calidad de visitante. Defensa dura y buena selección de lanzamientos fue la fórmula que le permitió a los viedmenses irse arriba en los primeros minutos del pleito en Trelew. El 17-11 era justificado, con un gran trabajo de Lucas Bianco en el goleo desde el perímetro. Pero Bernardo Murphy movió el banco, hizo ingresar a Walter Cordero y los aciertos de éste, más los altos porcentajes de Martín Aguirrezabala, le permitieron al local clausurar los primeros diez minutos con ventaja: 26-25. Nuevamente la Fusión fue más en los primeros pasajes del segundo tramo. Se puso 36-30 y dominaba el desarrollo. Esta vez fue Ramiro Heinrich el que saltó desde la banca y le cambió la cara al Globo, en contraposición con un Alejandro Papalardi que estuvo muy errático y no pesó como otras noches en la zona pintada. Otra vez emparejó las cifras Huracán y así se mantuvo hasta la chicharra final. Fue Facundo Brizuela, de buena tarea, el que con un doble puso la mínima diferencia para la visita antes del descanso (41-40). En el tercer cuarto se inició el despegue de Alianza en el tanteador. Si bien en otros tramos del encuentro había conseguido diferencias, en esta ocasión supo como mantenerla. A lo hecho por Lucas Bianco se sumaron en estos períodos definitorios Mauricio Beltramella, responsable de un par de triples valiosos y Héctor Martiarena, que hizo sentir su potencia. Una vez que Alianza logró poner una luz y mantenerla, jugó con la desesperación de Huracán, que reaccionó hasta llegar a cuatro puntos abajo, pero al que le pesó la obligación de mantener la localía.
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