Petrolera podría excluir a los “dragones”

COMODORO RIVADAVIA (DyN).- La petrolera PAE advirtió que se “reserva el derecho de excluir” de puestos de trabajo en el yacimiento chubutense de Cerro Dragón a quienes participaron de los incidentes hace dos semanas durante una protesta por reclamos salariales. “Todos no van a poder seguir trabajando en el campo nuestro. PAE se reservará el derecho de recibir a aquellos que son trabajadores de buena voluntad y de excluir a quienes participaron de la violencia o amenazan con actos violentos”, dijo el vocero de la compañía, Mario Calafell Loza, en declaraciones radiales. El portavoz de la operadora hizo así un balance de la reunión que finalizó a última hora del jueves con el sector disidente de la Uocra llamado Dragones y las empresas contratistas para negociar salarios en el marco de la conciliación obligatoria decretada por el gobierno provincial. En tanto, el subsecretario de Trabajo, Marcial Paz, dijo que los trabajadores representados por Raúl Murgas y Guido Dickanson presentaron ayer un documento con seis puntos básicos de reclamo que “fue rechazado” por la operadora. El funcionario precisó que pese a ello se avanzó en resolver otras cuestiones, como la reubicación de los trabajadores, los salarios caídos y el reingreso del personal en la planta. Paz dijo que en el marco de las negociaciones se resolvió “garantizar el pago de los salarios de todos los trabajadores involucrados en el conflicto”, que se hará efectivo durante el período de la conciliación obligatoria. Al ser consultado por el reclamo de equiparación salarial que hacen los “dragones”, que motivó la toma del principal yacimiento del país, el subsecretario estimó que eso deberá seguir tratándose en la mesa de diálogo. El vocero de la petrolera manifestó en este sentido que “tenemos bastante claro que las cuestiones que deben discutirse son las cuestiones salariales de última instancia, es decir, lo que termina al final de cada recibo después de todos los conceptos que se incluyen. Esto es lo que vamos a discutir”.

Las negociaciones tras la violenta toma siguen estancadas.