Piden prisión en suspenso para una empleada de Salud

Le imputan la sustracción de un medicamento oncológico

Marcelo Ochoa

El 26 de este mes se conocerá la sentencia a Sandra Riquelme. Su abogado reclamó el cambio de calificación.

VIEDMA (AV).- Tres años de prisión en suspenso pidieron para una empleada de Salud. El Fiscal de Cámara, Juan Ramón Peralta, acusó a Sandra Riquelme del delito de “peculado” por la sustracción de un medicamento oncológico de la Droguería Central de Salud, en momentos en que la empleada se desempeñaba en el área del Programa de Control de Cáncer de la provincia en 2007. La defensa ejercida por Manuel Maza reclamó la absolución de Riquelme y el cambio de la calificación del hecho de peculado a hurto. El Tribunal integrado por Francisco Cerdera, Pablo Estrabou y Jorge Bustamante leerá la sentencia el 26 de este mes. En su alegato, Peralta explicó que el peculado es un delito contra la administración pública que atenta contra la seguridad y el ámbito de reserva en el que deben estar los bienes que en “este caso quedó patentizado”. Aclaró que si bien la imputada ocupaba funciones de menor jerarquía, estaba habilitada para retirar medicamentos. “Estaban dadas las condiciones para actuar sobre seguro frente a las fragilidades de un sistema basado en la confianza y buena fe que puede presumirse en los servidores públicos y que sin embargo fue violada en este caso”, aseguró el fiscal que también solicitó para Riquelme tres años de inhabilitación para el manejo administrativo de medicamentos y otros elementos públicos depositados, así como de su registración y traslado. Esta causa se inició tras la denuncia de un empleado de la Droguería que aseguró que Riquelme se guardó en su cartera una caja de medicamento de ese lugar en momentos en que era preparado un pedido de medicinas de ese tipo. Para Peralta el testigo Mariano Cafre, sordomudo, fue creíble y relató el hecho con gran fuerza de convicción. En cambio, Maza dijo que este hecho no configura peculado que exige que quien lo cometa debe tener la administración, custodia y percepción de los objetos o caudales. “Ninguna de estas circunstancias estuvieron en algún momento en cabeza de mi defendida que no administraba, percibía ni custodiaba efectos de la administración pública, ni siquiera los afectados al control de cáncer, responsabilidad que sí tenían funcionarios de quienes ella dependía”. Maza sostuvo que aún creyendo que Riquelme tomó el medicamento y lo guardó en su cartera, igual fue entregado. Tras solicitar la absolución, el abogado planteó “hasta cuándo se cortará el hilo por lo más delgado cuando otros que deberían responder hoy integran listas de candidatos a legisladores en algún partido de oportunidad”, en referencia al médico Kowalyszyn.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios