Piratas desafían secuestrando otros cuatro barcos

NAIROBI (Télam).- Piratas somalíes secuestraron cuatro barcos y a más de 60 marineros en las últimas horas, tras haber prometido represalias por cinco compañeros muertos por fuerzas navales de Estados Unidos y Francia en recientes rescates de rehenes.

Los piratas, que siembran el terror en una de las rutas marítimas más transitadas del mundo, prometieron vengar la muerte de tres camaradas a manos de francotiradores estadounidenses que liberaron al capitán Richards Phillips y de otros dos muertos por fuerzas francesas en otro rescate ocurrido la semana pasada.

Un día después de que el presidente estadounidense, Barack Obama, prometiera combatir la piratería hasta el final, bucaneros somalíes afirmaron que ningún «enemigo» podrá amedrentarlos. «Nuestros últimos secuestros muestran que nadie puede impedirnos proteger nuestras aguas del enemigo porque creemos en morir por nuestra tierra», dijo el pirata Omar Dahir Idle desde la ciudad somalí de Harardhere.

El jefe máximo de las Fuerzas Armadas estadounidenses afirmó que tomaba muy en serio estos comentarios. Sin embargo, el almirante Michael Mullen, jefe del Estado mayor conjunto, dijo a la cadena ABC que Estados Unidos está «bien preparado para tratar con cualquier cosa como ésa».

El capitán Phillips, quien se ofreció como rehén para que los piratas liberaran a la tripulación de su barco, el Maersk Alabama, fue rescatado el domingo luego de que francotiradores de la Marina mataran a tres piratas que lo tenían cautivo hacía cinco días.

La compañía naviera dueña de su barco anunció que el capitán se reunirá hoy con los 19 miembros de su tripulación en el puerto keniano de Mombasa y desde allí viajará a la base Andrews en Maryland.

Pese a la confianza de Mullen y a las advertencias de Obama, piratas somalíes capturaron cuatro barcos más en las últimas horas, entre ellos dos secuestrados ayer. Las nuevas capturas fueron el carguero de propiedad libanesa MV Sea Horse, el buque de carga a granel griego MV Irene E.M. y dos pesqueros egipcios. Funcionarios marítimos dijeron que el Irene tenía una tripulación de entre 21 y 23 filipinos, mientras que la Cancillería egipcia informó que había 36 pescadores, al parecer todos ellos egipcios, en los dos barcos. Se desconocía cuántas personas integraban la tripulación del Sea Horse, aunque un navío de 5.000 toneladas como ése probablemente necesita al menos doce marineros, dijeron expertos.

Una vocera de la OTAN dijo que el Sea Horse fue capturado frente a la costa Este somalí, horas después del secuestro del Irene en el cercano golfo de Adén, al norte de Somalia.

El golfo de Adén, que conecta el canal de Suez y el mar Rojo con el océano Indico, es uno de los corredores marítimos más importantes del mundo, transitado por unos 20.000 barcos por año.