Pobreza y escenario poscrisis centran debates

CUMBRES DEL G8 Y EL G20

TORONTO/HUNTSVILLE (Canadá).- Las medidas a tomar tras la crisis financiera global y la lucha contra la pobreza son los temas centrales que debaten los líderes del G8 y el G20 en sendas cumbres en Canadá.

“El mensaje de la Unión Europea para ambas cumbres en Canadá es claro: “no debemos permitir que se debilite la resolución de la acción global y coordinada”, dijo el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.

Pero las diferencias entre la UE y Estados Unidos en torno al curso a seguir tras la crisis financiera internacional mantienen protagonismo en Canadá. La canciller de Alemania, Angela Merkel, volvió a negar ayer las críticas de Estados Unidos respecto a que las medidas de ajuste implementadas en su país frenen el crecimiento económico.

Alemania goza actualmente de tasas de crecimiento altas, “por lo cual es momento de reducir el déficit”, aseguró, enfatizando que la UE recibió en este sentido el apoyo del Fondo Monetario Internacional (FMI). Tanto Alemania, como el Reino Unido o España han presentado paquetes de ahorro multimillonarios.

La canciller reconoció en paralelo que no están dadas las condiciones para lograr la aprobación de un impuesto global a las transacciones financieras, tal como proponía el bloque europeo, y admitió que la propuesta es vista con escepticismo tanto por países industrializados como por los en vías de desarrollo.

De hecho, el borrador de la declaración final del G20 no hace mención específica a este impuesto. El documento que le fue adelantado a DPA dice en términos generales que hubo acuerdo sobre una serie de principios para hacer que las instituciones financieras asuman costos de eventuales crisis del sector.

Según el borrador, para el G20 la prioridad sería el crecimiento económico. Al mismo tiempo “las economías desarrolladas” se comprometerían a poner en orden sus cuentas públicas. El documento insta en tanto a finalizar “tan pronto como sea posible” las negociaciones sobre comercio internacional en pos de la apertura de los mercados globales, conocida como Ronda de Doha.

Para Merkel, el mundo necesita sin embargo una nueva arquitectura financiera. Los problemas pueden ser resueltos sólo en forma global, advirtió. “No se trata de peleas, sino de discusiones acerca del camino correcto.” En relación a los recortes en Europa, el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, afirmó que el objetivo es “salvar el crecimiento económico a mediano plazo”.

Pero el secretario del Tesoro norteamericano, Timothy Geithner, remarcó en declaraciones a la BBC desde Washington que el “mundo no puede ser tan dependiente de Estados Unidos como en el pasado”.

Europa no sólo tiene que preocuparse por cómo reduce la deuda sino también por cómo crecer más. Las naciones económicamente más potentes tienen que preocuparse ahora por el crecimiento y por recuperar la confianza, añadió.

A la cumbre de ayer en Huntsville del G8 (el grupo de los siete países más industrializados sumada Rusia) le sucede la del G20 (el grupo que reúne a las naciones más industrializadas y las economías emergentes, tales como China, India y Brasil) el fin de semana en Toronto. (DPA)