Podrían quitarle la concesión a empresa que maneja trenes

El presidente Néstor Kirchner aseguró ayer que el gobierno analiza rescindir los contratos de las empresas que «no están a la altura de las circunstancias», luego de haber calificado como un «sabotaje» el incendio que perjudicó el funcionamiento de la ex línea de ferrocarriles Roca.

«Estamos trabajando para que aquellos concesionarios que no están a la altura de las circunstancias tengan las sanciones que correspondan, hasta el nivel máximo de la rescisión de contratos», dijo el presidente Kirchner.

«Obviamente sí, por qué no», enfatizó Kirchner al ser consultado por la posibilidad de que el gobierno le quite la concesión a la empresa Metropolitano, que maneja el servicio ferroviario con cabecera en Constitución y despliegue hacia la zona sur del Gran Buenos Aires y La Plata.

Tras una disertación en una reunión de la Asociación Empresaria Argentina (AEA), Kirchner retomó hoy la idea que había comenzado a esbozar ayer en cuanto a que las demoras ocasionadas en el servicio de la ex línea Roca por el incendio en el panel de control, buscan generar «caos» y «un ánimo incorrecto».

Según la información que maneja el gobierno, el incendio del domingo último en la estación de Constitución fue iniciado por tres preservativos de látex cargados con ácido para que la sustancia entrara en acción en focos «diferenciados», pero en forma «simultánea».

«Lo del domingo no fue contra el gobierno, sino contra el norma funcionamiento del Estado, porque con esa acción no se perjudica a un Gobierno sino a la gente en su conjunto», agregó el Presidente.

El jefe de Estado cargó especialmente contra la empresa Metropolitano -concesionaria de la ex línea Roca-, cuyos voceros salieron a negar que el incendio del domingo se hubiera producido como consecuencia de un «autosabotaje».

Más temprano, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, había vuelto a denunciar «acciones desestabilizadoras» y apuntó contra sectores que quieren «llevar agua para su molino» con hechos como el incendio registrado en un tablero central de la ex línea Roca.

«Estos métodos, la Argentina ya los pasó, ya los ha vivido y no debemos permitir que vuelvan», enfatizó Fernández.

El funcionario no descartó que se registre una pelea «de negocios» o que se busque «desestabilizar» a algún «funcionario» con ese episodio, y consideró que la intencionalidad de lo ocurrido debe ser determinada por la Justicia. De cualquier modo, Fernández destacó que «evidentemente ha habido una acción directa» para que «los trenes dejen de funcionar».