Policía francesa desalojó a estudiantes que ocupaban la Sorbona

La policía francesa desalojó ayer con gases lacrimógenos y palos a unos 300 estudiantes que por casi tres noches tomaron la universidad parisina de la Sorbona en protesta por una ley laboral para jóvenes impulsada por el gobierno.

Unos 150 policías antidisturbios ingresaron en el edificio poco antes de las 4 hora local (medianoche en la Argentina) por una puerta trasera y a pedido del rector de la universidad, y en 15 minutos echaron por la fuerza a los estudiantes, 26 de los cuales fueron detenidos, dijeron voceros de la policía francesa.

Las fuentes precisaron que 31 policías y otras dos personas sufrieron heridas leves, entre ellos un fotógrafo que recibió un golpe cuando los estudiantes arrojaban botellas y sillas a los agentes en la universidad, símbolo de la revuelta estudiantil de mayo de 1968 y tomada desde la noche del miércoles.

Millones de franceses manifestaron esta semana en París y otras 160 ciudades francesas en protesta contra el llamado Contrato de Primer Empleo (CPE) para menores de 26 años promovido por el primer ministro conservador, Dominique de Villepin.

Los estudiantes y sindicatos dicen que la norma, aprobada esta semana por el Congreso, permitirá a los empleadores contratar y echar más fácilmente a los jóvenes trabajadores. La ley contempla contratos de dos años que permiten despidos sin indemnización y con preavisos de sólo 15 días, y el gobierno dice que reducirá el desempleo juvenil, que llega al 23 por ciento de los menores de 25 años, una de las tasas más altas de Europa.

Muchos ven en esta reforma un primer paso del gobierno para terminar con varios de los importantes beneficios sociales que brinda el Estado francés.

Los sindicatos de estudiantes calificaron la medida como «inadmisible, ilegitima y escandalosa», mientras que el ministro de Educación felicitó a las autoridades de la universidad pública.

En diálogo con Télam en el barrio latino de París, en las inmediaciones de la Sorbona, el presidente de la Unef, uno de los principales sindicatos estudiantiles, Bruno Julliard calificó el desalojo como «inadmisible, ilegítimo y escandaloso». «Hemos ocupado la Sorbona, algo que no se hacía desde 1968. Está claro que vamos a seguir, si no es aquí, será en otra facultad. El movimiento continúa, eso esta claro», dijo Julliard. (Télam-SNI)