Insultaron y agredieron al fiscal Diego Luciani: «A vos la historia te va a condenar»
El episodio ocurrió el sábado mientras el letrado compartía una cena con amigos en Mar del Plata. La responsable sería una mujer que acompañaba a un habitual encuestador del Gobierno.
El fiscal Diego Luciani profundizó las denuncias tras el juicio por la causa Vialidad.
A escasos días de la condena a la vicepresidenta Cristina Kirchner por la causa Vialidad, el fiscal Diego Luciani fue agredido por una mujer mientras cenaba este fin de semana en un restaurante de Mar del Plata. «Me das asco», fue uno de los insultos que más resonó.
El episodio ocurrió el sábado a las 22 horas en el restaurante Lo de Fran, ubicado cerca de la zona del puerto de la ciudad balnearia. En ese momento el fiscal se encontraba junto a un grupo de parejas amigas, cuando una mujer que acompañaba al politólogo Artemio López, habitual encuestador del Gobierno, lo increpó en un restaurante.
«Veni acá… qué ganas de vomitar. Vení acá, me das asco…«, se pudo escuchar en el local. Por el incidente no se radicó ninguna denuncia policial.
En un clima de tensión, Luciani y su grupo pidieron la cuenta sin ordenar plato principal y le manifestaron al mozo que los atendió que se habían “sentido incómodos” por la situación. Es que según el entorno del fiscal, López no paraba de reírse a carcajadas.
El encuestador reveló luego a sus allegados que era la primera vez que concurría al restaurante y que su diálogo con el mozo –quien estaba sorprendido por la situación- sólo se refirió a la comida.
Por su parte, la mujer decidió levantarse a increpar a Luciani. «A vos la historia te va a condenar«, le gritaba de manera constante. Incluso intentó golpearlo, una situación que fue impedida por otra persona.
El fiscal Luciani, lejos de amedrentarse, y pese a que desde su mesa le pedían que no reaccionara, se puso de pie y también respondió alzando la voz. “A ustedes los va a condenar la historia, señora”, enfatizó en dos oportunidades.
Desde el exterior del local, el custodio de Luciani detectó que algo extraño estaba sucediendo. Ingresó raudamente y buscando poner paños de agua fría, alejó al hombre de la justicia separándolo a una distancia prudencial de la compañera de Artemio. Luciani se sentó y dirigiéndose a sus acompañantes fue categórico. “Nos vamos”, ordenó.
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