Pontaquarto aseguró que el asesor de Constanzo distribuyó el dinero de las coimas

Actualizado a las 20:22

BUENOS AIRES (Télam).- El arrepentido ex secretario parlamentario Mario Pontaquarto reiteró hoy que Martín Fraga Mancini, colaborador del ex senador justicialista Remo Constanzo, distribuyó entre los senadores parte de la coima pagada para aprobar la Reforma Laboral durante el gobierno de la Alianza.

Durante el careo al que Pontaquarto y Fraga Mancini fueron sometidos hoy por disposición del juez federal Daniel Rafecas, el colaborador de Remo Constanzo volvió a negar -como lo hizo cuando fue indagado en la causa- su participación en la entrega de dinero a legisladores, pero Pontaquarto lo descalificó al asegurar que «recibió presiones» para desconocer el hecho.

Tras el careo, Pontaquarto amplió su indagatoria, ya que por un «intenso trabajo» realizado con el entrecruzamiento de llamadas telefónicas se le pidió que proporcionara algunos nombres y números que no aparecían en su agenda personal. Fraga Mancini, que fuera colaborador del ex senador Remo Constanzo, estuvo imputado en la causa porque Pontaquarto, cuando en diciembre de 2003 admitió haber transportado y entregado unos 5 millones de pesos para el pago de los sobornos, sostuvo que aquél sabía sobre el cobro de las «coimas» para votar la ley laboral.

Fraga Mancini «volvió a negar su participación en todo, pero es una persona muy débil y no pudo contestar ninguna de las preguntas que yo le hice durante el careo», dijo Pontaquarto a los periodistas al término del trámite procesal. El «arrepentido» consideró que Fraga Mancini «recibió presiones», porque «los senadores no iban a permitir que contara la verdad». Ante Rafecas Fraga Mancini rechazó haber mantenido conversaciones o tenido trato frecuente con Pontaquarto, lo que éste trató de desmentir contando pormenores sobre la actividad de familiares del empleado del Senado y algunas características relacionadas con su residencia y modo de vida.

Pontaquarto recordó que, luego que él denunciara el pago de los sobornos, Fraga Mancini «fue dado de baja del Senado» pero que, más tarde «algo habrá ocurrido para que (los miembros de ese cuerpo) José Luis Gioja, Carlos Verna y Jorge Yoma pidieran su reincorporación». Pontaquarto, que tiene asignado dos custodios, manifestó tener el «presentimiento» de que la causa «va a avanzar» porque «se está trabajando fuertemente y se han conseguido algunos éxitos», por lo que no descartó que sea citado para nuevos careos, entre ellos el que ya estaría previsto con una ex empleada de la SIDE, Gladys Motta.

La mujer se desempeñaba en la SIDE en abril de 2000, cuando Pontaquarto aseguró haber retirado del organismo la suma que luego habría entregado al entonces senador nacional Emilio Cantarero para su distribución entre varios de sus pares. «No temo carearme con ninguno de los imputados», agregó Pontaquarto, quien señaló que en el tribunal habrían detectado a un empledo de la SIDE que dijo haberlo visto en el lugar para la época del retiro del dinero.

El juez federal Rodolfo Canicoba Corral, subrogante como instructor de la causa, habia procesado a Pontaquarto, Cantarero, al ex jefe de la SIDE Fernando de Santibañes y al ex senador nacional José Genoud, pero meses atrás la Cámara Federal dejó sin efecto esa medida y dispuso profundizar la pesquisa. La resolución fue apelada por el fiscal general Germán Moldes, pero la Cámara de Casación Penal confirmó la nulidad de los procesamientos por «vicios de fundamentación».

Otro de los motivos por los que la Cámara Federal anuló los procesamientos fue que aún no se pudo acreditar la existencia de la reunión que Pontaquarto indicó que se realizó en la Casa de Gobierno cuando Genoud le planteó el tema al entonces presidente Fernando de la Rúa. En esa ocasión el legislador le habría dicho al ex Jefe del Estado que «el peronismo necesita otras cosas» para la aprobación de la ley; a lo que De la Rua le habría respondido: «eso arréglenlo con De Santibañes».