Por primera vez, la Unesco será dirigida por una mujer

La 35ª Conferencia General de la UNESCO confirmó el jueves por amplia mayoría el nombramiento de la búlgara Irina Bokova como su nueva directora general, primera mujer que accede al cargo, tras una disputada elección que la enfrentó al egipcio Faruk Hosni.

De los 193 países miembros de la UNESCO que participan en la Conferencia General, que se celebra del 6 al 23 de octubre, 166 respaldaron el nombramiento de Bokova, que a partir de diciembre reemplazará al japonés Koichiro Matsuura al frente de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.

Siete países votaron en contra, tres votos fueron nulos, dos países se abstuvieron y cuatro no votaron, precisaron fuentes de la UNESCO. Once países no votaron porque no estaban al día con sus pagos.

Bokova, de 57 años, había sido elegida a principios de septiembre por el comité ejecutivo de la UNESCO al cabo de cinco rondas por voto secreto, un hecho inédito en la organización, debido a la resistencia provocada por la candidatura del ministro egipcio de Cultura, Faruk Hosni, acusado de antisemitismo, y que sin embargo, desde un principio era el favorito.

«Las elecciones fueron democráticas y transparentes en una competencia abierta», afirmó Bokova el jueves en su primera rueda de prensa en la sede de la UNESCO, interrogada sobre la elección de septiembre. «He dicho que tengo mucho respeto por todos los candidatos, incluido el señor Faruk Hosni», respondió Bokova antes de asegurar que «nunca» creyó en el choque de civilizaciones porque además «es una teoría peligrosa».

Bokova indicó que durante la campaña por el puesto de director general de la UNESCO había entablado «una amistad» con Faruk Hosni y anticipó que en diciembre viajará a El Cairo para participar en una conferencia, invitada por el ex secretario general de la ONU, el egipcio Butros Butros Ghali. «Es importante tender la mano a todos nuestros amigos, incluido al mundo árabe», afirmó Bokova que apeló a la «unidad» en el seno de la UNESCO.

Ex comunista, Irina Bokova, hasta ahora embajadora de Bulgaria en París, es además la primera representante de un país de Europa del Este que accede a una alto cargo en el seno de la ONU. Consideró que su nombramiento al frente de la UNESCO debe ser un «mensaje» para que las mujeres «tengan más confianza, ambiciones y sueños de que pueden acceder a cargos similares».

En presencia de Matsuura, que en diciembre concluirá su segundo mandato, Bokova se declaró «muy emocionada» y dijo que continuará con las reformas emprendidas. Anticipó que el 23 de octubre, día de clausura de la Conferencia General, dará a conocer las «líneas estratégicas» de su «visión sobre el papel» de la UNESCO.

La confirmación de Bokova tuvo lugar al día siguiente de la entrada en el consejo ejecutivo de Perú, Venezuela y Haití, en el marco de la renovación de 31 miembros. Estos tres países se suman al grupo III que reúne a los países de América Latina y el Caribe en el que por dos años más sesionarán Argentina, Chile, Cuba, El Salvador y Jamaica. También ingresaron al consejo ejecutivo Santa Lucía, Barbados y Granada.

Pese a su presencia en instancias ejecutivas de la UNESCO, América Latina no dirige la UNESCO desde hace más de 50 años, en función de una regla no escrita sobre la alternancia regional. Supuestamente, en esta ocasión, el director general debía ser de origen árabe o latinoamericano, argumento con el cual la ecuatoriana Ivonne Juez de Baki también fue candidata en esta elección. América Latina estuvo solamente una vez al frente de la UNESCO. Fue entre 1948 y 1952 con el mexicano Jaime Torres Bodet. Otro director general de habla hispana fue el español Federico Mayor Zaragoza entre 1987 a 1999.

AFP