Arenas para fracking: pobre beneficio para Chubut

Tras la investigación de “Río Negro” sobre las arenas silíceas de Dolavon, la provincia del Chubut intenta ahora subir el irrisorio valor de las regalías que les queda por la extracción del recurso.

Ocurre que el ministro de Hidrocarburos, Martín Cerdá, sorprendió a la población y a los legisladores de su provincia al revelar que la compañía que explota las arenas con destino a Vaca Muerta paga apenas 15 centavos por cada tonelada extraída. Añadió que se analiza establecer una ley para elevar el canon a $ 30, de los cuales $ 15 ingresarán a las arcas provinciales.

Precisamente, este diario planteó la incógnita sobre el real beneficio que deja a la provincia el millonario negocio de las arenas para frácking.

La investigación del periodista Ítalo Pisani puso en evidencia los vínculos comerciales de dos conocidos actores en el negocio de las arenas que desarrollan las empresas Rada Tilly SA en sociedad con Shale Kompass: Guillermo Coco, ex ministro de Jorge Sapag, y Ángel Salazar, ex concejal de Rincón de los Sauces y socio del intendente Marcelo Rucci. Salazar y Rucci son accionistas de Shale Kompass.

Cerdá debió concurrir a la Legislatura para responder preguntas de diputados del Frente para la Victoria.

Desde Hidrocarburos de Chubut trascendió que la nueva cifra que se estudia en concepto de canon resulta igualmente exigua, teniendo en cuenta el volumen de la actividad. Se calcula que cada camión cargado con 30 toneladas contiene un producto por un valor de aproximadamente 10.000 dólares. Saldrían 50 camiones por día, es decir 500.000 dólares (10 millones de pesos).

Uno de los políticos que viene alertando sobre este tema es el intendente del pueblo chubutense 28 de Julio, jurisdicción de las canteras. Sostiene que su localidad no obtiene un centavo de regalías y cree que la vecina Dolavon (donde está localizada la planta) apenas logra 100.000 pesos mensuales en concepto de tasa municipal.

Omar Burgoa hizo notar que la empresa tributa por su negocio sobre la base de un valor de arena de calidad inferior (categoría 3, como la que se usa en la construcción) y no por la que verdaderamente se extrae (de categoría uno, correspondiente a silíceas).