Preocupaciones

En ámbitos oficiales se dejó trascender ayer que existe preocupación por las eventuales derivaciones del prolongado conflicto con los estudiantes secundarios. El tema comenzó con reclamos edilicios y adquirió cuerpo con las intimidaciones policiales a los jóvenes.

No en vano ayer, al inaugurar un edificio escolar en Añelo, el ministro de Educación, Rodolfo Káiser, aclaró que se están solucionando los «planteos» de la comunidad educativa.

Ayer, voceros del gobierno confiaron su preocupación por la posibilidad de que ocurra un incidente con algún estudiante. El jefe de Policía, comisario Wálter Cofre, ya había admitido que para la fuerza el tema es «problemático».

En el gobierno piensan que los gremios perdieron poder de movilización y por eso fogonean a los estudiantes, con el riesgo de que en cualquier momento haya un enfrentamiento. Admiten, también, que hay malestar por la forma en que Manganaro ha venido manejando el asunto.

En realidad, el gobierno no es el único preocupado. En el gremio docente y en la multisectorial observan la movida oficial como un intento de llevar preocupación a los padres, para que éstos impidan la movilización de sus hijos. (AN)

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