Preventiva para otro involucrado en el caso SW

Insisten en apartar al juez Liporace, quien ahora procesó a la empresa

BUENOS AIRES (DyN/Télam)- Un empleado de Southern Winds fue procesado con prisión preventiva por su presunta participación en el contrabando de cocaína a España, por orden del juez en lo Penal Económico Carlos Liporace, quien sufrió un nuevo revés luego de que la Fiscalía de la Cámara recomendara su apartamiento de la causa en la que la empresa también quedó «procesada».

Es que, más allá de la falta de mérito que benefició a los directivos de la aerolínea SW por el envío de los 60 kilos de droga, la compañía -en la figura de su presidente, Juan Maggio- fue procesada por la omisión en los controles que permitieron que ese cargamento saliera del país el 16 de setiembre.

Mientras, fuentes judiciales indicaron a DyN que el fiscal general de la Cámara en lo Penal Económico, Ramiro Rodríguez Bosch, recomendó el apartamiento de Liporace, al respaldar el planteo que había hecho la fiscal Gabriela Ruíz Morales en torno de la presunta «parcialidad» del magistrado en el proceso.

Sin embargo, Liporace insistió ayer en defenderse, subrayó que las defensas de los imputados han avalado su continuación en el expediente y aseguró que el caso no está paralizado.

No sólo remarcó que la aerolínea fue procesada por la omisión en los controles el marco del Código Aduanero, sino que aseguró que el miércoles dictó el procesamiento del último detenido en la causa, Ariel Tamburrini, quien era jefe de base de SW en el aeropuerto de Barajas.

Tamburrini, cuya falta de mérito fue revocada por la Cámara, se convirtió entonces en el cuarto procesado por el contrabando agravado, junto al gerente de ventas de SW, Fernando Arriete; el supervisor de la aerolínea, Claudio Baudino, y el encargado de relaciones públicas de la empresa en Ezeiza, Walter Beltrame.

Ahora, los integrantes de la Sala B de la Cámara, Carlos Pizzatelli, Marcos Grabivker y Roberto Hornos, analizan la presentación que hizo en las últimas horas Rodríguez Bosch, quien insistió en la imputación de presunta «parcialidad» del juez.

La fiscal de Instrucción, Ruíz Morales, se había quejado por el trato que había dado Liporace a los imputados ya que -ante la misma sospecha- algunos fueron detenidos y otros no. Además, le endilgó haber adelantado opiniones ante la prensa y restringir la actividad del Ministerio Público.

Fuentes del caso indicaron que, si bien los camaristas le pidieron el miércoles una copia del expediente al magistrado, la Sala B se tomará unos días para examinarlo en su totalidad antes de adoptar una resolución sobre la continuidad de Liporace.

«Entiendo que no debe hacerse lugar a esta recusación planteada por la señora fiscal -dijo ayer Liporace-. No sé por qué ahora el fiscal de Cámara dice que se perdió la parcialidad».


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