Principio de acuerdo en el presupuesto tras agobiante reunión

BUENOS AIRES – El gobernador de Salta, Juan Carlos Romero, aseguró anoche que «hay un principio de acuerdo» entre las provincias y el futuro gobierno nacional respecto del nivel de transferencias para el 2000, que podría ser cercano a los 1.350 millones de pesos mensuales.

El acuerdo también incluiría el compromiso del futuro gobierno para implementar mecanismos para la refinanciación de las deudas provinciales, que totalizan unos 18.000 millones de dólares, a plazos más extensos que los actuales.

«Hay un principio de acuerdo a través de un Pacto Fiscal, para lo cual se está haciendo un borrador en el que confiamos que aquellas provincias que lo consideren oportuno puedan adherir y aquellas que no, no le sea aplicable», señaló Romero en un alto de la prolongada reunión que en el Consejo Federal de Inversiones.

Sin embargo, Romero, tras dar la información al periodismo, sostuvo que Salta no firmará el acuerdo ya que, por lo momento, «lo tiene que estudiar».

Los participantes del encuentro no explicaron cómo se aplicaría el acuerdo en la práctica si hay provincias que no adhieren, si se tiene en cuenta que los montos que se discuten son para todas las jurisdicciones en conjunto.

Pese a señalar que por el momento no firmaría el acuerdo, Romero sostuvo que «el grado de adhesión, en principio, es mayoritario» y que la Alianza habría modificado su propuesta de basar el nivel de transferencias en el promedio de 1999 (unos 1.320 millones de pesos mensuales) y se optaría por un promedio entre 1998 y 1999.

De esa forma, el nivel de transferencias se ubicaría en 1.350 millones, de los que 900 millones serían de libre disponibilidad y 450 millones de asignación específica.

Sobisch y Verani

En la reunión, mientras el gobernador electo de Neuquén, Jorge Sobisch, reclamó que se trate caso por caso -apuntó que a la provincia se le deben 50 millones del anterior pacto fiscal -, el mandatario de Río Negro, Pablo Verani destacó que muchos Estados del interior ya hicieron todos «los esfuerzos posibles» y que esperan de la Nación una refinanciación de sus pasivos.

El encuentro fue a puertas cerradas y las posturas de Sobisch y Verani fueron reveladas por un vocero del gobernador de Salta, Romero, uno de los justicialistas que mantiene la posición más dura respecto del ajuste que demanda la Nación.

Verani eludió ayer el contacto por la prensa pero Sobisch, antes de entrar a la sala de negociaciones, le dijo a «Río Negro» que en principio estaba dispuesto a respaldar «esta etapa» de la nueva administración.

No obstante acotó: «también tengo que defender los intereses de mi provincia. Vengo a escuchar y antes de poner la firma en cualquier documento de consenso, lo voy evaluar muy bien». El sucesor de Felipe Sapag confirmó que pondría sobre la mesa la acreencia de 50 millones que tiene Neuquén por el anterior pacto fiscal.

El portavoz de Romero, por su parte, contó a este diario que Sobisch había solicitado dividir las aguas, para que se trate en forma particular la situación de cada una de las provincias.

Según esa portavoz, Verani sorprendió cuando demandó que la Nación hiciera los principales «ajustes», aunque luego fue designado como uno de los miembros de la comisión redactora que debería establecer la forma en que se refinanciarán las deudas de las provincias que se encuentran en la peor situación.

Trascendió, en tal sentido, que los vencimientos del próximo semestre se refinanciarían en 18 meses, y el resto a 10 años. También se confirmó que las provincias más adeudadas podrán tener un manejo discrecional del 50% de la asistencia que finalmente se otorgue.

De los peronistas, los más conciliadores con la Alianza fueron el bonaerense Carlos Ruckauf, Carlos Reutemann (Santa Fe), Rubén Marín (La Pampa) y José Manuel De la Sota (Córdoba). Sin embargo, «Lole» Reutemann se quejó por una deuda que tiene Nación con la Universidad de Santa Fe.

Llegar al congreso

Los futuros ministros de Economía, José Luis Machinea, y del Interior, Federico Storani, mantuvieron la extenuante reunión con la mayoría de los gobernadores, con el propósito de consensuar un acuerdo de transferencias para el año que viene, que obraría en forma transitoria mientras se discute la nueva ley de Coparticipación Federal.

Ruckauf abandonó la reunión antes de su finalización, dando a entender que las negociaciones demandarán mucho tiempo. «Hay una comisión redactora que está trabajando sobre un acuerdo de Pacto Federal. Cuando termine, tanto sea esta noche como mañana, esperamos firmar un pacto entre la Nación y la provincia de Buenos Aires», indicó.

Ruckauf puntualizó que «el compromiso de Buenos Aires es ayudar al presidente electo y dijo que «a partir de enero» se estudiará «un mecanismo de apoyo por parte de la Nación, para que los bancos acreedores vayan a refinanciar a las provincias que lo necesiten».

La carrera contra el reloj se debe a que la semana pasada los bloques del PJ y la Alianza acordaron debatir hoy el presupuesto, que De la Rúa quiere tener aprobado antes de su asunción, el viernes. (DyN y ABA)