«Probá de entrar», le dijo a su hermana 31-7-03

ROCA (AR).- Cuando los policías llegaron a la vivienda ubicada sobre la calle Rohde entre San Juan y Kennedy, nunca pensaron que iban a protagonizar un enfrentamiento armado.

A la comisaría Tercera había llamado la hermana de la víctima, quien estaba preocupada porque su hermano estaba encerrado desde hace varios días.

Cuando llegaron los policías Hernández y Ramos, se dirigieron al patio de la vivienda, lugar al que da la puerta trasera de la peluquería, donde se encontraba Angel Bin.

La hermana del peluquero empezó a dialogar, tratando de convencerlo para que deponga la actitud. Sin embargo, Angel Bin le dijo que no iba a salir.

Luego le manifestó que no entren y posteriormente algo así como «probá de entrar».

Según lo que tienen los investigadores, la joven habría intentado abrir la puerta, pero la encontró pesada. Es que del otro lado, el peluquero había cruzado un pesado mueble.

Fue así que los dos policías empezaron a empujar la puerta, y en ese momento se produjeron los primeros disparos de escopeta.

La distancia fue muy corta, y tal vez por eso el cerrajero sufrió una herida leve y la hermana de la víctima resultó milagrosamente ilesa.

De todos modos, los escopetazos se sucedieron, y dos de ellos impactaron contra una pared de la propiedad, que sacó hasta pedazos de ladrillos, según se informó.

De ahí en más fue todo confusión, y en ese momento los policías habrían vaciado sus cargadores, aunque ya estaban gravemente heridos.

Un tercer uniformado llegó cuando los heridos habían salido rápidamente en el patrullero en busca de atención médica.

Sin saber lo que pasaba, encontró al cerrajero Mauricio Pita que estaba escondido en el fondo de la propiedad, y con una herida leve.

El pudo contar algo de lo que había sucedido, aunque después de casi una hora se pudo establecer que no había más personas que el cuerpo sin vida del peluquero, que yacía en medio de un charco de sangre.