Pronóstico reservado

CONTEXTO

BUENOS AIRES (ABA).- Formato de película archirrepetido. Con el proyecto del 82% móvil para las jubilaciones, tal como fue aprobado en Diputados, un Senado con fuerzas extremadamente parejas, tratará hoy darle paso libre para beneplácito de más de 5 millones y medio de beneficiarios, o mandarlo a vía muerta para no hacer sucumbir un sistema estatal en el que se apoya el gobierno nacional. El oficialismo kirchnerista, con alguna deserción –Adriana Bortolozzi, formoseña, ha sido dada por “perdida”– y ciertas dudas –no se sabe si el chubutense Marcelo Guinle aportará para el quórum, aunque Horacio Lores del MPN lo facilitará (ver aparte)–, le dejará a la oposición la responsabilidad de reunir el número necesario (37) para poder sesionar. El sube y baja está en un punto medio por lo que la incertidumbre persistirá hasta último momento. “La realidad es muy cambiante. Habrá que ver que pasa a la hora del timbre”, indicó a este diario un senador que se encargó de hacer notar que últimamente, en temas como el Indec, glaciares y salideras “fallaron todos los pronósticos”. Desde la bancada que preside el rionegrino Miguel Pichetto se trabaja fuertemente para boicotear la sesión de esta tarde: “hay falencias estructurales, pues no dicen de donde van a sacar la plata para pagarle a los jubilados y lo único que quieren es lesionar al gobierno”, argumentaron. La oposición se esperanza con un nuevo empate y la posibilidad de que el vicepresidente Julio Cobos vuelva a convertirse en el árbitro de la situación como ocurrió con la resolución 125 sobre retenciones agropecuarias. Pero esa hipótesis es descalificada de plano por los K, en cuyo seno también se han detectado fisuras.

ARNALDO PAGANETTI