«Que bajaran a la tierra»

Se aduce, para justificar el aumento de gas, que sólo afecta a los consumidores. Pues sepan los que han pergeñado esta fábula que el gas es un servicio que lamentablemente los menos pudientes no podemos regular, como sí lo pueden hacer aquellos que tienen dinero para construirse buenas viviendas, termoaisladas y con calefacción por radiadores o por piso radiante alimentado con una caldera que, además, provee agua caliente para uso doméstico con un consumo estimado entre $50 y $60 por bimestre. Mientras los que nos hicimos o hacemos nuestras viviendas a los ponchazos no podemos aislar los techos. Apenas si podemos poner chapas, muchas veces son de cartón o las de cinc más finas, por lo que para no morir de frío hay que tener calefactores que cada uno consume lo mismo que la caldera de un chalet, más un termotanque o calefón. Ni hablar de la cocina, que a veces el horno se usa más para calefaccionar o hacer pan que para poner algo de comida, por ej. ¿asado?, ¿qué es eso?

Bastaría que los iluminados que hacen decretos bajaran a la tierra y pasaran por donde se factura el gas y compararan entre la boleta de un country y una de un barrio obrero clase media baja. ¿O será que ellos viven en country y no querían que les tocara el aumento?

 

Juan José Torres, DNI 10.680.162

Zapala


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