Quedó en libertad el último de los “horneros”

LA PLATA (Télam).- Horacio Anselmo Braga, el último de los integrantes de la banda de Los Hornos condenados por el crimen de José Luis Cabezas, recuperó ayer a la tarde su libertad de la Unidad 9 de La Plata.

Braga quedó libre tras el pago de una fianza de 20.000 pesos fijada por la justicia de Dolores para excarcelarlo, tras cumplir con buena conducta los dos tercios de su condena que había sido reducida por el tribunal de Casación bonaerense y beneficiado por el sistema 2×1.

De esta manera, ya no quedan en prisión los condenados en juicio oral a prisión perpetua por ser la «mano de obra» del secuestro en Pinamar y posterior asesinato en General Madariaga del reportero gráfico, el 25 de enero de 1997.

Se trata de los integrantes de la denominada «Banda de Los Hornos», Braga, José Luis Auge y Sergio Gustavo González, que recuperaron su libertad a ocho años del caso que conmocionó al país y Héctor Miguel Retana que murió de sida en prisión.

Braga salió de la Unidad 9 de La Plata a las 14.15 bordo del automóvil de su defensor Fernando Burlando, y a diferencia de sus cómplices, aceptó un breve diálogo con la prensa para declarar que se sentía «contento» por estar libre y haber «pagado la deuda con la sociedad».

«A partir de ahora espero vivir tranquilo, estudiando, trabajando y nada más», manifestó tras aclarar que para la familia Cabezas «no hay nada para decir».

Por su parte, Burlando consideró que la justicia y el Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) «han hecho un muy buen trabajo de rehabilitación» social de sus defendidos y recordó que tanto Braga como González estudiaron Derecho mientras cumplían sus condenas y «están a punto de ser abogados».

Los «horneros» habían sido condenados a prisión perpetua por el crimen del reportero gráfico el 2 de febrero de 2000 en un juicio oral en Dolores.

Sin embargo, el fallo fu apelado ante el Tribunal de Casación bonaerense que en noviembre de 2003 les redujo la pena a 18 y 20 años de prisión.

Los camaristas de Dolores habían liberado por los mismos motivos a Auge, en diciembre de 2004, y a González, en febrero de este año.

Sin embargo, el año pasado la misma cámara rechazó la excarcelación de Gregorio Ríos, el ex jefe de la custodia del empresario Alfredo Yabrán, condenado como instigador del crimen.

Ríos había sido condenado en juicio oral a la pena de reclusión perpetua considerado «instigador inmediato», pero Casación redujo la pena a 27 años de prisión.

La justicia determinó que Ríos le pidió al ex oficial de la policía bonaerense Gustavo Prellezo que “sacara del medio” a Cabezas en Pinamar durante el verano de 1997, porque molestaba a su patrón, Yabrán, con las guardias periodísticas frente a su mansión. De acuerdo con lo establecido en el juicio oral, Prellezo aceptó la oferta porque pretendía venderle servicios de seguridad a Yabrán, por lo que convocó para coordinar el “trabajo” a sus camaradas Sergio Camaratta y Aníbal Luna, también oficiales de Pinamar. Esta línea investigativa determinó también que Prellezo contrató como “mano de obra” a los “horneros” que llevaba a la costa para robar en casas de fines de semana.

Los “horneros” tenían la “zona liberada” para cometer el hecho por el entonces comisario de Pinamar Alberto Pedro “La Liebre” Gómez.