¿Quién será el décimo?

El 31 de octubre de 2000, Juan Ignacio Sánchez fue el primer argentino en la NBA. Le ganó por minutos a Rubén Wolkowisky y aunque no brillaron en el mejor básquet del planeta, le abrieron la puerta a sus coterráneos.

A Emanuel Ginóbili se le “fue la mano”, porque se dio lujos sólo reservados para pocos, como ser campeón o jugar el All Star, uno de los anillos lo compartió con su amigo Fabricio Oberto y otros, como Andrés Nocioni, Carlos Delfino o Luis Scola, no conocieron la gloria, pero fueron piezas indiscutidas de sus equipos. El Chapu tuvo sus mejores momentos en la casa de Jordan, los Bulls de Chicago; Delfino fue de menos a más, ganó confianza en Toronto y fue clave en Milwaukee; y Luifa siempre fue clave en Houston y después de cinco años en el equipo texano, firmará con Phoenix (ver aparte).

Oberto no fue el mismo después de los Spurs, perdió minutos en Washington y el corazón le dio señales de alerta, hasta que dijo basta en Portland. Walter Herrmann completó el G8, con altibajos en Charlotte y Detroit.

Esta temporada venía sin novedades argentinas, pero los Knicks confiaron en Pablo Prigioni, quien se dará el gusto de ser NBA a los 35. Debutará en el mismo lugar que Pepe Sánchez, el mítico Madison Square Garden de Nueva York y tratará de dejar su huella. Parece increíble, pero el cordobés será el noveno. Parecía que la lista se cortaba, pero ahora ya hay que pensar en el décimo. ¿Quién será?