“Quieren destruirme, pero no lo van a conseguir”
Julio De Vido no faltó ayer a la cita. “No vengo a ejercer el derecho de defensa porque no hallo legitimidad en quienes me imputan, ni en el método con que lo hacen, dado que es violatorio de la Constitución”, dijo el ex ministro de Planificación antes de comenzar, en definitiva, una defensa de su gestión. “Quieren destruirme, pero no lo van a conseguir”, dijo.
Las calles de la zona del Congreso volvieron a amanecer, como el día anterior, con pancartas que le mandaban “fuerza” al ahora diputado del FpV. Poco antes de enumerar cada uno de los “logros” de su gestión como ministro, De Vido calificó el intento por excluirlo de la Cámara como “nulo, vacío, inconsistente, arbitrario y revanchista”. Y aseguró que su gestión no tuvo “ningún reproche” de la AGN. Un dato falso.; los hubo.
De Vido renunció ser “blanco de un plan de marketing” y afirmó siempre haber estado a disposición de la Justicia y nunca haberse amparado en fueros. En junio del año pasado, en una causa por enriquecimiento ilícito, solicitó al juez Luis Rodríguez, en base a la ley de fueros, dejar sin efecto un pedido de allanamiento en su contra.
Julio De Vido no faltó ayer a la cita. “No vengo a ejercer el derecho de defensa porque no hallo legitimidad en quienes me imputan, ni en el método con que lo hacen, dado que es violatorio de la Constitución”, dijo el ex ministro de Planificación antes de comenzar, en definitiva, una defensa de su gestión. “Quieren destruirme, pero no lo van a conseguir”, dijo.
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