Recuperó su vivienda pero los usurpadores la desmantelaron

NEUQUEN (AN)- Ivana Rosales no puede ocultar su alegría. Después de una larga batalla judicial recuperó su vivienda en Plottier. Y fue al cumplirse cuatro años de lo que considera su segundo nacimiento, porque en 2002 su marido intentó asesinarla a golpes y la encerró en el baúl del auto, creyéndola muerta.

La mala noticia es que la casa, que permaneció usurpada al menos dos años, está desmantelada. «Se llevaron hasta los azulejos del baño», le explicó ayer a «Río Negro». Por eso hizo un llamado a la solidaridad: «necesito todo lo que hay en una casa: calefactor, grifería, inodoro, puertas interiores, vidrios y pintura antihongo». Quiere irse a vivir allí con sus tres hijos de 11, 9 y 7 años.

La vivienda fue ocupada en 2004, cuando su dueña estaba internada en un hogar para mujeres golpeadas recuperándose de la paliza que casi le cuesta la vida, y sus usurpadores resultaron desalojados la semana pasada por orden del juez Daniel Varessio.

Ivana es empleada contratada en la municipalidad de Neuquén y explicó que no puede afrontar semejante inversión.

Al mismo tiempo, necesita mudarse a su casa recuperada cuanto antes, porque tiene temor a que se la vuelvan a usurpar y además quiere dejar de pagar alquiler.

Según explicó ayer, ya hizo gestiones ante la municipalidad neuquina y la Defensoría del Pueblo de esta capital, donde le prometieron estudiar su caso aunque no le ofrecieron nada concreto. Similares gestiones encarará ante la municipalidad de Plottier y otros organismos públicos. «Todo el que pueda ayudarme que me llame al 154-246916», pidió Ivana.

En abril de 2002 quien entonces era su marido, Mario Garoglio, la golpeó con piedras en la cabeza, intentó ahorcarla y la encerró en el baúl de su automóvil creyéndola muerta.

Ella sobrevivió aunque tuvo que someterse a un largo tratamiento de recuperación.

Un año después, la Cámara Criminal Segunda condenó a Garoglio a 5 años de prisión con un polémico fallo, ya que encontró «circunstancias extraordinarias de atenuación» en beneficio del acusado.

De todos modos Garoglio no cumplió la condena porque escapó y permanece prófugo, aunque se cree que sigue en la región.