De apuro
Las elecciones provinciales serán dentro de apenas 93 días. Suficiente para cumplir los plazos de ley, pero estrecho para orientar procesos políticos y desplegar una campaña.
ANÁLISIS
La información es poder, afirman. Después de alentar versiones difusas, el gobernador Alberto Weretilneck acaba de anunciar que la elección de autoridades provinciales será el domingo 14 de junio.
Dentro de apenas 93 días. Suficiente para cumplir los plazos de ley, pero estrecho para orientar procesos políticos y desplegar una campaña.
Aprovecha que sus competidores tienen todavía mucho para definir y, en cambio, su sector ya tiene resuelto el candidato a gobernador: él mismo.
Además, aleja el comicio de cualquier puja nacional. Esto le conviene en virtud de la propia naturaleza personalista de su fuerza política, sin “paraguas” partidario ni referente nacional consensuado, aun cuando él ha expresado su preferencia por Sergio Massa.
En cuanto a la campaña, cuenta con su tercera y principal ventaja: ha usado el aparato del Estado para promover su figura y podrá seguir haciéndolo. En cambio, sus competidores tendrán que definir slogan, invertir en afiches y avisos televisivos, armar giras por la provincia.
Si la principal objeción que se le hace a su gobierno es la falta de capacidad operativa, tampoco deberá -en un lapso tan breve- dar cuenta de si supo gastar con eficiencia el dinero de la renegociación petrolera.
El desafío está planteado. Habrá que ver si el resto de los actores políticos actúa con la agilidad necesaria para equilibrar el escenario.
Alicia Miller
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