Graves anomalías en las cuentas del gremio de la Fruta

Las comprobó una pericia encargada por la Justicia. Detectaron elevados subsidios del gobierno con destino desconocido, fondos de cuotas sindicales a cuentas particulares y cheques convertidos en efectivo dirigidos “a López”.

Redacción

Por Redacción

Una pericia contable pedida por la Justicia corroboró serios desórdenes en la administración de fondos del Sindicato de la Fruta durante varios años de la gestión de Rubén López.

Elevados subsidios mensuales entregados por el gobierno rionegrino cuyo destino y rendición se desconoce, dinero que iba a la caja de ahorro personal del tesorero del gremio, confusión patrimonial en la administración del Sanatorio Allen, falta de balances y cheques cobrados por caja convertidos en efectivo con destino “a López”, son algunas de las conclusiones del dictamen.

La pericia -a la que accedió “Río Negro”- fue ordenada por el Juzgado Penal 4 de Cipolletti, que instruye la causa originada en la denuncia de los dirigentes gremiales opositores Julio Aliaga y Luis Vega. Las graves irregularidades también fueron señaladas por este diario en la investigación “Los barones de la Fruta”, que originó una denuncia en la Justicia Federal por parte de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac).

En la causa de Cipolletti están denunciados López, el tesorero de la Obra Social Juan Domingo Lescano, familiares y dirigentes de la actual gestión gremial.

La denuncia presentó pruebas sobre cheques y subsidios millonarios sin rendir, compras superfluas, cobros no depositados, ingresos de farmacias sin control, dineros faltantes y curiosos préstamos de dirigentes, entre otras irregularidades.

Anomalías confirmadas

El peritaje contable da fe de numerosas inconsistencias, faltantes y desórdenes en las cuentas:

• Se certificaron transferencias mensuales de la Tesorería General de la Provincia de Río Negro al sindicato. Hay, por lo menos, cuatro “subsidios” abonados entre enero y fines de marzo por $ 300.000, 400.000, 400.000 y 409.000. Se sabe que las remesas fueron frecuentes durante años. No obstante no fue posible determinar el destino que se les dio a esa plata ante la “falta de registros contables que provengan de información ordenada y auditada”. Los fondos emitidos en cheques se convirtieron en dinero en efectivo, sin dejarse registros de quiénes lo retiraron. Y no hay rendición alguna. Existen constancias de que el gobierno siguió otorgando subsidios al sindicato. El último registrado fue en enero de este año cuando se asignó un “aporte no reintegrable” por 1.750.000 pesos destinado a útiles escolares.

• Se determinó que se abrió una caja de ahorro en el Banco Nación a nombre personal del tesorero del Consejo Central del gremio, Marcos Bielma, para que se depositen los fondos provenientes del pago de las empresas en concepto de cuota sindical. Este mismo dirigente abrió un año después una cuenta en el Banco Patagonia para recibir el depósito de dinero y cheques originados en acuerdos de pago de los afiliados al gremio en concepto de cuota sindical. Ambas aperturas contaron con el aval de la comisión directiva del gremio, y se justificaron en la inminencia de las elecciones (en el primer caso) y en el hecho de que Nación no había aprobado aún las nuevas autoridades (en el segundo). Tampoco se hallaron rendiciones.

• Los dineros destinados al Sanatorio Allen, adquirido por el gremio, constituyen otra fuente de irregularidad. La pericia percibe indicios de confusión patrimonial entre el Sindicato, la Obra Social y la SRL de la clínica: hay diversas compras solventadas con cheques emitidos por el gremio.

• En determinados meses de 2010, 2011, 2012 y 2013 hubo cheques que figuraron como “dinero retirado para Caja”. Las órdenes de pago tienen imprecisiones, anotaciones a mano o en lápiz negro y ausencia de firmas. La mayoría de esos cheques tienen la leyenda “A López”. Otros señalan: “Caja (Obra Social”) o en concepto de “préstamo”. Los valores observados totalizan unos 792.000 pesos.

• Se pudo comprobar la existencia de otra “cantidad considerable de cheques del Banco Nación cobrados por Caja”, es decir que se convirtieron en efectivo, en 2013 y 2014. No está explicitado el destino del dinero. Son 13 cheques los auditados por un monto total de 1.443.000 pesos. La mayoría tiene como beneficiario a Rubén López. Uno solo de esos cheques es por $ 400.000.

• El peritaje no pudo determinar dónde fueron a parar muebles comprados para la delegación Roca del gremio. No se halló inventario de bienes que permita cotejar las adquisiciones con la existencia real. Este diario pudo saber que esto ocurrió porque el allanamiento se realizó en la vieja sede, inactiva hace unos años, cuando debía haberse hecho en la nueva, con otro domicilio.

• La falta de balances actualizados y auditados (el último es de 2011) y los libros contables obligatorios, “base fundamental de un adecuado control de gestión de cualquier organismo”, hace “muy vulnerable la administración y muy difícil su control administrativo y financiero”, subraya la pericia.

Sin control

El gobierno rionegrino envió mensualmente subsidios al sindicato, pero éstos nunca se rindieron ni se supo qué destino tuvieron.

Datos

2.235.000
pesos en cheques fueron cobrados en efectivo sin rendición. Muchos de ellos iban dirigidos “a López”.
El gobierno rionegrino envió mensualmente subsidios al sindicato, pero éstos nunca se rindieron ni se supo qué destino tuvieron.

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