Rendidos por Montaner

NEUQUÉN (AN).- Aquellas miles de mujeres que soñaban con esa voz que cantaba en la novela de las nueve de la noche, pudieron ponerle cuerpo y vivir en persona el encuentro con uno de los artistas más románticos de Latinoamérica.

Ricardo Montaner con su interacción constante con el público y su buen humor dejó rendido a sus pies a las más de cinco mil personas que lo ovacionaron desde su primera aparición.

El imponente show que brindó la noche del sábado mostró el mejor momento del cantante en estos 20 y tantos años de carrera.

La cita arrancó a las 22 en el estadio Ruca Che y se extendió por más de dos horas cerrando así una de «las mejores noches en toda la gira en Argentina» como lo expresó él mismo sobre el escenario.

La puesta en escena fue brillante: músicos y coristas además de tres pantallas de alta definición que sirvieron de apoyo a los fans para no dejaran de cantar ni una sola canción.

El argentino-venezolano no dejó profesar su encuentro con Cristo y como ello le cambió la vida.

Al comienzo del show se proyectó un video en el cual aparecieron músicos latinoamericanos de la talla de Juan Luis Guerra, Alejandro Sanz, Cristian Castro y Juanes que repetían «yo le canto a Dios», como si se tratara de una misa religiosa.

Con el tema «Yo le canto» Montaner apareció a contraluz de la pantalla, le siguió «Las cosas son como son», el nombre del disco que vino a promocionar

Montaner desplegó todo su romanticismo y su buen humor que lo caracteriza a lo largo de toda la noche y no dejó de sorprender a algunos «iluminados» que recibieron desde canciones personalizadas, libros y álbumes de fotos.

En el medio y con anécdotas graciosas, fue presentando a sus hijos que lo acompañaron durante el «Montaner Tour 2009».

«Buenas noches Neuquén y feliz cumpleaños» fueron las primeras palabras del cantante dejando en claro que estaba al tanto del aniversario de la ciudad.

A lo largo del show nunca dejó de interactuar de manera simpática con el público.

De hecho, en un momento eligió a Sofía, una pequeña niña que fue escogida como una musa inspiradora de una canción improvisada en el momento y se llevó la envidia de todas las mujeres que querían que Montaner les cante a ellas.

Con un recorrido por toda su discografía, Montaner hizo delirar a su público con sus clásicos románticos «Castillo Azul», «Quisiera» y «Bésame». Pero luego con «Cachita» y «Conga» el ritmo cambió y el cantante hizo levantar de sus sillas a sus fans para que se pongan a bailar.

Ya en el final del show llegó la frutilla del postre, la tan ansiada canción de la novela «Valientes» «Volver» para luego seguir con «Déjame llorar», «El poder de tu amor», «Tan enamorados» y «La cima al cielo».

Para terminar eligió «Me va a extrañar» dejando a todas y todos sus fans muertos de amor por este Montaner cada vez más romántico, apasionado y aferrado al amor por Dios.