Rescatan hoy el cuerpo hallado cerca de El Bolsón 

EL BOLSON (AEB).- Si las condicio-nes climáticas lo permiten, una brigada de rescate intentará hoy llegar hasta el cuerpo del andinista Pablo Mattianda, que fue hallado muerto en una grieta del glaciar existente en el Cerro Año Nuevo. El joven de Carmen de Patagones desapareció el 31 de enero de 1999 en el lugar.

En el rescate participará personal de la Comisaria 12 y de Gendarmería Nacional apoyados por un helicóptero facilitado por el Plan Nacional de Manejo del Fuego. La aeronave trasladará a los montañistas hasta un punto plano distante unos 45 minutos de marcha a pie del glaciar.

El cuerpo de Pablo Mattianda (hay pocas dudas de su identidad) fue encontrado por el baquiano Luis Palma, quien rastreaba la zona en busca del joven de 22 años, a pedido de su familia.

El comisario Ramón Angel Castro, titular de la unidad policial local señaló a «Río Negro» que «Palma inmediatamente avisó en esta dependencia. Además tuvo la previsión de sacar fotografías del cuerpo, lo que permitió una identificación parcial».

Mattianda se encontraba en el refugio Los Laguitos cuando decidió ascender a una cumbre cercana. Al alejarse del lugar lo hizo vestido sólo con una remera, una bombacha de campo y botines de «trekking». Otra particularidad era que llevaba un pañuelo al cuello, el que fue hallado por el baquiano cerca del cuerpo.

Con los datos del vestuario, la ayuda de la toma fotográfica y la ubicación del cuerpo quedó prácticamente dilucidada la identidad del cadáver.

El cuerpo fue encontrado en una grieta profunda del glaciar y los rescatistas deberán decidir cuál es el mejor camino para bajarlo. «Ya conseguimos una camilla de hierro y bolsas» indicó el comisario Castro.

En el lugar hay mucho hielo y nieve, lo que dificulta la llegada desde arriba, aunque según el baquiano se puede acceder por un túnel existente en el hielo.

El médico forense que reciba el cuerpo de Mattianda determinará si es necesario realizar una autopsia, según explicaron fuentes policiales.

La desaparición de Mattianda en el verano de 1999 motivó un exhaustivo operativo en el que se utilizaron dos helicópteros y fue necesaria la participación de personal policial, de gendarmería y brigadas de rescate de Bariloche. El comisario Castro indicó a Río Negro que «la zona donde apareció fue rastrillada varias veces pero la ubicación dentro de la grieta no permitió encontrar el cuerpo antes. Tal vez pasaron a pocos metros de él.