Revuelo en el PJ por el apoyo de Solá a Cristina

BUENOS AIRES (DyN/ Télam)- Las preferencias de Felipe Solá por Cristina Fernández como candidata en Buenos Aires provocaron un profundo malestar a la diputada Hilda «Chiche» Duhalde, quien confió que el gobernador le rogó en su momento que lo secundara en la fórmula pero ahora dice que ella pertenece a la «vieja política».

«Vino a mi casa y me rogó que lo acompañara en la fórmula» a la gobernación para las elecciones del 2003, aseguró «Chiche» Duhalde, quien entonces se negó a hacerlo, mientras Solá decía por medios de comunicación que «ninguna mujer se le resistía».

«Ayer (por el miércoles) me desayuné que yo soy la vieja política», dijo la legisladora a los periodistas acreditados en el Congreso Nacional. En un almuerzo con Mirtha Legrand, Solá mezcló ese día elogios y críticas a «Chiche» Duhalde, de quien señaló que «tiene una concepción de la militancia política más antigua», que fue la frase que enojó a la diputada.

La relación entre Solá y «Chiche» estuvo teñida siempre por los altibajos, pero en los últimos tiempos entró en una curva descendente, debido a la diferencias sobre las candidaturas para el 2005 y para el 2007.

En los últimos días, el duhaldismo reconoció que «Chiche» será la candidata a senadora en el 2005 y que se mantienen intactas sus posibilidades de ser la postulante a gobernadora en el 2007.

Es que el duhaldismo considera que una eventual postulación de Cristina Fernández de Kirchner en el 2005 pondría fin a su hegemonía de casi 15 años en territorio bonaerense.

Alvarez definió las palabras de Solá como «desacertadas, impropias e infelices», aseguró que causaron un «profundo malestar» en el PJ provincial y sostuvo que fue un «grosero error de apreciación» haberla incluido a la legisladora en lo que entiende como «vieja política».

«La vieja política es la actitud del dirigente que tiene que representar a la gente y se escapa por la tangente hablando de temas de candidaturas o hablando de temas sin saber qué es lo que expresa», lanzó por su parte Basile.

Este legislador dijo, en consecuencia, no comparti «con el gobernador ciertas circunstancias» porque «no son comparables: Cristina milita en Santa Cruz y sin lugar a dudas es una compañera valiosa, y 'Chiche' Duhalde trabaja muy fuertemente comprometida con la provincia de Buenos Aires», afirmó.

D'Elía, en cambio, se alineó con Solá: «Comparto el gusto de Felipe. Yo creo que Cristina es la persona que, por capacidad, formación, solidez intelectual, convicciones, necesita la provincia de Buenos Aires para llevar adelante quizás la principal de las reformas: terminar con el corporativismo político».

Pero en cuanto a sus críticas a «Chiche» Duhalde, el piquetero oficialista fue más contundente que el propio Solá: «Yo nunca la tuve de candidata, afortunadamente. Ella es una versión anticuada y autoritaria de la política, una imagen gastada del clientelismo asistencialista», remató.

«Realmente -continuó-, creo que Cristina hoy está en condiciones de liderarnos a todos: a aquellos que están por dentro del PJ y a otros tantos miles que por afuera estamos constituyendo la transversalidad».

Con sus bemoles, Duhalde tomó siempre la decisión de quien ocuparía la Casa de Gobierno en La Plata. Lo hizo en 1999 con Carlos Ruckauf, con Solá en el 2002 y en el 2003, y espera hacerlo en el 2007.

Al duhaldismo le molestan los acercamientos entre el gobernador y el presidente Néstor Kirchner. «Solá ya dio el salto», es la figura que utilizan los duhaldistas para retratar lo que consideran es «la huida» del gobernador del campamento duhaldista.