Río Negro ya suma 10.000 aspirantes al Plan Jefes

VIEDMA (AV).- Más de 10.000 rionegrinos ya aspiran a constituirse en beneficiarios del plan social de jefes de familias desocupados, según los listados de los municipios.

Por estos días Nación evalúa los datos de estos iniciales anotados, para conocer si cumplen con todos los requisitos, esencialmente si están a cargo de grupo familiar con menores de 18 años y sin ningún ingreso.

Mientras tanto, la secretaria de Trabajo, Ana Piccinini advirtió a «Río Negro» sobre distintas dificultades que presentará la puesta en marcha de este plan de inclusión social.

En general, se reconoce que el programa no incorpora inicialmente a jóvenes y mayores que están desocupados pero no son padres de hijos menores de 18 años. Esos sectores serían incluídos en los próximos meses. Además hay contradicciones a la hora de precisar cuándo se abonarán los primeros 150 pesos.

Por eso, Piccinini insistió que el programa es nacional y que su cartera casi no tiene injerencias en el manejo. Los listados son directamente cargados por los municipios, la evaluación pertenece a Nación y la provincia sólo plantea un acompañamiento técnico, se indicó.

En su análisis, la funcionaria alertó sobre inconvenientes a partir del entrecruzamiento de datos filiatorios en la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) a medida que vayan llegando las planillas. Cabe recordar que estos datos son decisivos para la selección de beneficiarios. (ver recuadro)

Por su parte, el director de Empleo, Gustavo Otero, anticipó que el plan nacional no incluye beneficiarios que actualmente son mayoría en los programas Trabajar, como jóvenes y mayores desocupados con hijos a cargo.

Mientras tanto, la secretaria de Acción Social de Viedma, Alicia Carbone, aceptó esa particularidad pero fue más optimista. Comentó que se piensa incorporar a esos sectores, previéndose -por ejemplo- iniciar la inscripción de los mayores de 60 años a partir de la segunda quincena de mayo. Según afirmó la funcionaria municipal, el decreto establece esas inclusiones pero el inconveniente es la complejidad de los criterios y selección de los beneficiarios. «La pauta de los jefes de familias es lo primero porque es más simple en su definición», afirmó Carbone.

El inicio del pago de los 150 pesos mensuales del beneficio también genera dudas. Las autoridades provinciales de Trabajo aseguran que Nación informó que la primera cancelación será en mayo, pero funcionarios municipales -entre ellas, la secretaria Carbone- advierte que el beneficio se abonará desde junio.

El Ministerio de Trabajo de Nación ya está efectuando un primer relevamiento de los datos y si bien la provincia no dispone de registros oficiales, consultas realizadas por «Río Negro» en los principales municipios proyectan en más de 10.000 los inscriptos.

El plazo para anotarse todavía está vigente y hasta el momento los listados contemplan que Viedma tiene 1.500 postulantes, General Roca cerca de 4.000, Cipolletti 1.100, Villa Regina 1.400, Choele Choel 190, Pomona 120, Lamarque 100, Luis Beltrán 200, Chimpay 100, Sierra Grande 150, San Antonio 160, y General Conesa 300. Estos registros suman 9.320 inscriptos, pero no incluye a Bariloche y otra veintena de municipios. Nueve -en su mayoría de la Línea Sur- remiten las solicitudes a la Secretaría de Trabajo para su carga ya que no dispone de la posibilidad de incorporar esa información directamente a los registros del Anses.

Se supo que Bariloche está demorada en la incorporación de este nuevo programa nacional ya que recientemente fue beneficiada con 3.000 puestos del Plan Trabajar por los graves inconvenientes registrados en el marco de la renuncia del entonces intendente Atilio Feudal, con lo cual recién se sabrá qué cantidad de anotados habrá para el Plan Jefes una vez que concluyan los Trabajar.

En el análisis inicial, Nación advirtió que un 17 % todavía debe pasar una nueva revisión para poder recibir el beneficio. La mayoría de los observados corresponde a inscriptos que no tenían número de CUIL pero también se advirtió que un porcentaje ya tenía beneficios previsionales o sociales.

Subprograma para empresas

La secretaria de Trabajo, Ana Piccinini, alertó sobre los inconvenientes del programa y desligó a la provincia sobre alguna responsabilidad en esto. Además, planteó subsidiar a empresas para que ellas absorban a los desocupados.

La titular de Trabajo dijo tener una alternativa para realizar una experiencia «piloto» en la provincia, que incluya la participación de la pequeña y mediana empresa. Precisó que en lugar de subsidiar al desocupado, se podría girar el dinero al sector empresarial para que luego lo devuelva en cuatro cuotas trimestrales. También propuso que en lugar de 150 pesos, «vayan al trabajador 200 pesos y 50 más se lo repartan en aportes previsionales y obra social a través del hospital público.

Piccinini consideró también que «se debería ser más estricto» en las pautas de la convocatoria nacional. «El tema es delicado, pues alguien puede no tener aportes sociales, no tener bienes a su nombre y no necesariamente puede ser excluido».

Por el contrario, advirtió que puede quedar afuera del programa una jefa de hogar con hijos a cargo de humilde condición «separada de hecho y que no tuvo posibilidad económica de hacer el divorcio, a pesar de que el ex marido tiene trabajo, para la ley y la Anses es casada».

Al ser consultada por la situación de aquellos que se anotaron y no accederán al beneficio, aseveró que «no sé que respuesta van a poder dar los municipios y cómo se puede parar esto, porque los intendentes no van a salir a pelearse con cada postulante» por estos motivos. Luego expresó cierta incertidumbre sobre lo que pasará con los seguros, porque «aquella entidad que haga una propuesta de contraprestación deberá hacerse cargo, dado que el Estado nacional» se desentiende del tema. (AV)