San Antonio aprobó el acuerdo con los Tarruella

Martín Brunella

SAN ANTONIO OESTE (ASA) En medio de un escándalo, el Concejo Deliberante local aprobó ayer con los votos de cinco de sus siete integrantes un acuerdo transaccional con la familia Tarruella que desde 2005 mantenía un litigio por la valiosa franja de tierras ubicadas al sur de este balneario. El acuerdo prevé que sobre cada una de esas fracciones el 35% quede para los privados y el 65% para el Estado.

Los cuestionamientos que promovieron duros cruces entre los ediles, que incluyeron gritos y acusaciones, estuvieron ligados a la existencia de lazos entre dos de las concejales oficialistas (María Negro y Alejandra Mazziotti) con integrantes de esa familia. El concubino y padre de los hijos de Negro, de apellido Vacarezza, sería primo hermano de la mamá de los descendientes de Héctor Raúl Tarruella (Miguel y Alejandro), que junto a la descendencia de Hermelinda y Alcira son los que se beneficiarán con la transacción aprobada. La concejal Mazziotti, en tanto, es prima hermana de los descendientes de Ana María Tarruella. Estos o están comprendidos dentro del acuerdo y presentaron ante el juzgado 1 de Viedma una cautelar, que plantea la prohibición de innovar avanzando extrajudicialmente, que fue desoída.

Ni Negro ni Mazziotti se excusaron y votaron a favor. Esta última fue la primera en adelantar su voto, y paradójicamente, reconoció que a futuro el arreglo podría hacer aguas, porque pidió que se tuviera en cuenta qué “en este acuerdo no están las hijas de Ana María y esto puede generar dudas”.

La piedra del escándalo fue arrojada por Negro, que aludió a las versiones acerca del parentesco de su concubino, tildándolas de falaces. El dueño de una emisora que estaba en el recinto pidió a viva voz que aclarara el tema, señalando a Mazziotti, que comenzó a increparlo en medio de un ataque de nervios, mientras que el titular del cuerpo, Claudio Palomequez, vociferaba “orden en la sala”. Quien puso en blanco sobre negro la situación fue el edil radical Pablo Fernández, que directamente le dijo a Negro que “tus hijos son familiares directos de los Tarruella, y a vos te alcanzan las generales de la ley y deberías excusarte. Nadie puede votar nada que favorezca a familiares directos o afines hasta el cuatro grado de consanguinidad. Con Mazziotti pasa lo mismo”.

La réplica del FpV fue risible, y llegó de la voz del edil Luis Ojeda. Sostuvo que “aquí nadie viene a calentar la silla, aquí se viene a votar, y esos son argumentos menores. Si bien el pueblo está cada vez más grande todos nos conocemos y si nos lleváramos por los lazos filiatorios que podrían beneficiar a tal o cual no podríamos votar nada”. Acto seguido, los votos de Negro, Mazziotti, Ojeda, Curiqueo y Palomequez, del FpV acompañaron el acuerdo, mientras que Fernández (UCR) y Rodríguez, del FpV, votaron en contra.

En la sesión de ayer, de San Antonio Oeste, los ediles pusieron fin al litigio de tierra con los Tarruella.