Se agrava el conflicto con Conicet y Caputo no renuncia

Cientos de investigadores y científicos de CONICET tomaron ayer la sede porteña del organismo para exigir la renuncia del Secretario de Ciencia y Tecnología, Dante Caputo, a raíz del bajo presupuesto que recibe la entidad y el recorte salarial dispuesto en el ajuste a los estatales.

En respuesta, Caputo responsabilizó al gobierno del ex presidente Menem por las aparentemente escasas partidas de fondos públicos que recibe el CONICET, el organismo estatal encargado de la investigación científica en Argentina.

«El CONICET es el único organismo estatal donde no se aplica el recorte del 12 %. Este último mes los empleados cobraron una bonificación», explicó Caputo a los periodistas.

El secretario de Ciencia y Tecnología respondió así a la protesta que iniciaron unos 50 investigadores y trabajadores del CONICET, que cortaron este mediodía la avenida Rivadavia al 1900, frente a la sede del organismo.

«Caputo pretende desmantelar el CONICET, eliminar la carrera de investigador y nos acusa de tener poca inserción universitaria, cuando el 74 % dicta alguna cátedra en la facultad», dijo uno de los delegados. También se reclaman los 19 millones que se recortaron en el presupuesto de este año.

Los reclamos de la comunidad científica al gobierno se intensificaron hace un mes cuando el titular del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas, Pablo Jacovkis, renunció a su cargo ante el anuncio oficial de reformas que afectan a la investigación científica en el país.

El CONICET tiene varias sedes regionales en todo el país, actualmente trabajan 3.765 investigadores que desarrollan 1.425 proyectos de estudio en las más variadas áreas de la ciencia y la tecnología. El organismo entró en una grave crisis financiera, luego de que el gobierno decidiera restar 19 millones de dólares a su presupuesto.

Científicos e investigadores solicitaron públicamente ayer, mediante una solicitada publicada en diarios, la renuncia de Caputo. «La gestión de Caputo se ha caracterizado por una ignorancia manifiesta respecto de la problemática de la investigación científica y tecnológica en el país», expresa el texto de la solicitada al tiempo que propone que la reforma para mejorar el sistema científico «no sacrifique ninguna institución estatal».

Los científicos reclaman también la renuncia del titular del CONICET, Andrés Carrasco, y piden al gobierno que cumpla con su promesa electoral de destinar el 1 por ciento del producto bruto interno (PBI) del país a la ciencia, cifra que en la actualidad sólo alcanza al 0,35 por ciento del PBI. (EFE, DyN)

«No desaparecerá, se reformará»

«No voy a renunciar», afirmó Dante Caputo ante el pedido de científicos que, a través de una solicitada dirigida a De la Rúa y publicada en distintos diarios de Buenos Aires, reclamaron la renuncia del funcionario.

«Al organismo no hay que hacerlo desaparecer sino reformarlo», resaltó el secretario. El plan para el Conicet será tratado en el Congreso y contempla el aumentos en las partidas para Ciencia, la modificación del actual sistema de categorización y jerarquías y la creación de un fondo especial para impulsar la investigación de jóvenes de hasta 33 años.

El punto de conflicto -según admitió Caputo- es el que propone trasladar actividades de investigación a universidades, lo que conduciría, según investigadores, al cierre del Conicet.

El secretario de Ciencia y Tecnología, Dante Caputo, sostuvo que el proyecto de ley que envió al Congreso para ese organismo pondrá a los científicos en un nivel más competitivo.

«En caso de ser aprobado por el Congreso, el proyecto para los próximos años hará que el CONICET sea más competitivo. Lejos de perjudicarla, beneficiará al área con mayor presupuesto. Frente a eso, algunos piden mi renuncia», dijo Caputo. Para él, la reforma enviada al Congreso, que se encuentra en análisis en la Comisión de Ciencia y Tecnología de la Cámara de Diputados, «mejorará notablemente los recursos para los investigadores y sus vínculos con el sistema universitario».

El CONICET, explicó el ex canciller, fue el único ente estatal que sorteó el ajuste del 12 % en los salarios superiores a 1000 pesos.