Se desplomaron las ofertas de gas para usinas

La subasta complementaria del sistema nacional recibió ofertas por apenas 3 millones de metros cúbicos. Además el precio ofrecido trepó un 29,6% con respecto al mes pasado.

Una nueva subasta realizada por el Mercado Electrónico del Gas (Megsa) para el aprovisionamiento complementario de las usinas del país para el mes que viene reflejó la grave crisis que enfrenta el sector gasífero de cara al inicio del invierno ya que el volumen conseguido fue un 72% inferior al del mes pasado y a un precio mucho más alto.

De acuerdo a los datos dados a conocer por Megsa sobre la subasta realizada a pedido de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa), el proceso contó con solo cinco ofertas que sumaron un total de 3 millones de metros cúbicos.

En detalle, la subasta contó con cinco ofertas, de las cuales 3 correspondieron a Neuquén y dos a Tierra del Fuego, siendo como es habitual la oferta más voluminosa (2 millones de metros cúbicos) la correspondiente a la Cuenca Neuquina.

Este valor contrasta con los 11 millones de metros cúbicos que se habían subastado el mes pasado y con los 14 que se ofrecieron en febrero, marcando que las empresas productoras y comercializadoras ya no cuentan con claros excesos de producción para colocar.

Pero además de esta caída en las ofertas, la subasta también reflejó un salto en el precio propuesto, dado que se pasó de un valor promedio ponderado de 2,60 dólares por millón de BTU en boca de pozo, a los 3,37 dólares que ayer se fijó en el proceso.

La subasta se realiza como complemento del aprovisionamiento que Cammesa ya garantizó para las usinas a través del Plan Gas Ar, pero que a raíz de los bloqueos en Vaca Muerta no se contará en su totalidad, al menos para el inicio de este invierno.

Es por esto que tanto desde Cammesa como desde las generadoras de energía térmica se da por hecho que en este invierno se disparará el uso de otros energéticos como el gasoil, fuel oil y el carbón mineral, los cuales no solo implican un mayor costo que el del gas natural, sino que además se trata de materiales mucho más contaminantes.

Esta tendencia hacia una generación térmica con una matriz mucho más sucia ya se había visto tanto en el invierno del año pasado como en la temporada de alta demanda de este verano, en ambos casos a raíz de la menor producción de gas natural del país.


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