Seis detenidos y policías heridos tras riña familiar

VILLA REGINA (AVR).- El intento de detener a un joven que agredía a su concubina menor de edad, terminó en una espectacular gresca en la que intervino toda una familia contra varios uniformados. El hecho tuvo como escenario el balneario de la Isla 58 de esta ciudad en la tarde del domingo, cuando el lugar se hallaba colmado de veraneantes y dejó como saldo a los seis detenidos con lesiones de carácter leve, y tres policías con heridas de distinta consideración.

El hecho tomó tal magnitud que calmar los ánimos demandó cerca de una hora y media, en tanto que también tuvieron que intervenir efectivos de la Unidad Quinta de Regina, de la subcomisaría 61 de Chichinales, de la subcomisaría 65 de Godoy y personal de la división tránsito.

Lo que parecía ser una apacible tarde de verano a orillas del río Negro en el balneario municipal de la Isla 58, se transformó en una pelea de dimensiones que sorprendió a los que se encontraban en el lugar.

En el lugar, además de una impresionante cantidad de piedras que fueron arrojada a los uniformados, quedaron diseminados envases de cervezas.

Todo comenzó alrededor de las 18.30, cuando dos motoristas que participaban de un operativo de control en el balneario advirtieron que un joven agredía a una menor. Según se pudo establecer, el joven de 18 años era la pareja de la menor de 15 años, la que en primer término fue golpeada con puñetazos y luego en el piso con puntapiés.

En ese momento un tío de la menor intervino para que cesara la golpiza, momento en el que también llegaron los dos uniformados.

Sin embargo, la presencia policial desencadenó que no sólo el tío de la chica se pusiera en contra de los uniformados, sino también el resto de la familia.

Al verse desbordados, lo efectivos solicitaron refuerzos a la comisaría Quinta desde donde se envió un patrullero. Sin embargo cuando los uniformados descendieron del auto, un grupo importante de personas se le fue encima mientras intentaban introducir al joven agresor al patrullero.

En el forcejo, el detenido rompió de una patada el vidrio de una ventanilla trasera, y luego alcanzó a escapar. En ese instante comenzó a caer una lluvia de piedras sobre los uniformados que solicitaron nuevamente refuerzos que llegaron desde la comisaría local y las unidades cercanas.

Una de las piedras que arrojaron contra los policías, impactó en la boca de uno de ellos que además del traumatismo le aflojó varias piezas dentarias. Otra piedra rompió la luneta de uno de los móviles. Asimismo, otros dos uniformados -entre ellos una mujer- también recibieron lesiones por las piedras.

Con la presencia de refuerzos, finalmente lograron detener a seis personas, tres de ellos mayores y dos menores de 13 y 16 años. Todos son integrantes de una misma familia. Los menores fueron entregados posteriormente a su madre.

En cuanto a los detenidos se pudo saber que se trataría de Marcos Viveros, de 18 años, Juan Viveros de 39, Orlando Garro de 18 y Gustavo Cornejo de 23. Uno de ellos sufrió una herida cortante en el párpado derecho, y los restantes escoriaciones. El hecho fue controlado a las 20.