Si Irán no responde pronto, caería el memorando

La suerte de “intimación” hecha en las Naciones Unidas a Irán por la presidenta Cristina Fernández, para que diga si aprobará el memorando que creará una comisión de juristas internacionales y permitirá que un juez argentino interrogue en Teherán a los 5 sospechosos de haber cometido la voladura de la AMIA, en 1994, deja entrever que ante la falta de respuesta podría considerarlo como un “desaire” y dar por caído el acuerdo aprobado por el parlamento con mayoría kirchnerista y repudiado por la oposición y las principales entidades judías locales. En Nueva York, Cristina hizo referencia al estancamiento de la causa durante 19 años, habló de las expectativas de cambio geopolítico en las relaciones entre Estados Unidos y la República islámica de Irán, pero insistió en avanzar en el esclarecimiento del atentado contra la mutual israelita, que costó 85 vidas. “Tenemos la voluntad de acordar, estamos abiertos”, señaló. Pero acotó: “Que no se confunda nuestra paciencia con ingenuidad o estupidez. Ya pasó un tiempo prudencial”. A comienzos de este mes, “Río Negro” dio cuenta de consultas secretas realizadas por funcionarios de la Rosada al fiscal Alberto Nisman, quien precisamente lleva adelante la acusación contra Irán, al que considera un “Estado terrorista”. En esa ocasión se habló de la posibilidad, debido a la indefinición del régimen de Irán, pasados 9 meses de la luz verde dada, con gran esfuerzo, por el Congreso Nacional, utilizar el foro de la ONU, para “desengancharse” del memorándum. Aunque eso no ocurrió, se avanzó en esa dirección. Casualmente, ayer, el canciller Héctor Timerman, gestor del acercamiento, declaró que “se va a seguir insistiendo con el diálogo”, tras lo cual, siguiendo las líneas directrices de la presidenta, insistió en que ahora se esperan acciones concretas de Irán. “Nos debe un informe. Tiene que cumplir con lo firmado”, dijo. (Agencia Buenos Aires)

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