Siete fetos y residuos infectados en un basural

CIPOLLETTI (AC).- No es la primera vez que en el basural de Cipolletti aparecen residuos patógenos mezclados con la basura domiciliaria. Pero el hallazgo de ayer estremeció: en dos bolsas de nailon, los cirujas encontraron siete fetos de pocos meses de gestación, dos placentas, jeringas, material descartable de al menos dos pacientes con HIV, delantales descartables, envases de suero rotos, recetarios y algunos papeles que darían pistas de su procedencia. En base a esta documentación, hay dos centros de salud de la ciudad en la mira.

Si bien todo indica que esos restos llegaron allí «por error», ya que no habría detrás ningún lugar de abortos clandestinos, una vez más surge gran preocupación por los riesgos que significa tanto para la gente que busca basura como para los cipoleños en general, que los desechos patógenos –y en este caso agravados por el material usado para enfermos de sida– lleguen a un sitio inapropiado.

Hace un par de años, hubo quejas de vecinos porque en un predio muy cercano al lugar donde día a día se depositan los residuos domiciliarios, se realizaba la quema de los residuos patógenos a cielo abierto, debido a que el horno que funcionaba en el basural no podía hacer frente a la cantidad de residuos que generaban los centros de salud.

Tras las reiteradas críticas el gobierno municipal decidió empezar a trasladar los patógenos a Roca, para ser destruidos allí.

Hasta ahora parecía que la situación estaba encaminada y que al basural municipal, ubicado en la zona norte, sólo llegaban los residuos domiciliarios. Pero el hecho de ayer demostró que no es así.

Alrededor de las 17.15 la gente que estaba revolviendo la basura como todos los días se topó con un hecho desagradable, escalofriante y peligroso.

En dos bolsas de nailon negras –de las de consorcio, no las habituales de color rojo que se utilizan para estos casos– había siete fetos bien conservados (estaban enteros), que tendrían poco tiempo de gestación y unos dos meses de descomposición. Además, entre otros elementos, había dos placentas, algunas jeringas, recetarios médicos y algo muy grave: material descartable de al menos dos pacientes con sida. Los nombres de estas personas estaban asentados allí.

En base a esta documentación, los investigadores tienen a dos centros de salud de la ciudad en la mira y prácticamente descartan que este hallazgo esté vinculado con algún sitio destinado a realizar abortos clandestinos.

«Todo indicaría que esas bolsas han llegado allí en forma errónea o involuntaria», sostuvo el comisario Juan Martínez, a cargo de la comisaría 24.

Personal a su cargo, del destacament Anai Mapu, fue el primero que intervino cuando los cirujas avisaron con qué se habían topado en la tarde de ayer.

Apenas se supo la noticia, Criminalística, el fiscal Oscar Cid y el secretario del Juzgado Penal 21 se constituyeron en el lugar para realizar las actuaciones de rigor.

«Hallazgo de fetos. Infracción a la ley de residuos patológicos», se caratuló por ahora la causa.

Las bolsas, y también algunos desechos patógenos que estaban en las inmediaciones, iban a ser llevados a Roca para continuar las pericias.

Jorge Maljasian, secretario de Servicios Públicos de la municipalidad, dijo que «es imposible» que un hecho así ocurra con el servicio que presta la comuna, porque hay un seguimiento de los residuos que se envían a Roca con sus respectivos remitos.