Sigue el conflicto en el istmo del Mari Menuco

NEUQUÉN (AN).- El cartel que acompaña la tranquera que abre camino hacia el istmo de los lagos Los Barreales y Mari Menuco dice “Propiedad privada. Comunidad mapuche Kaxipayiñ”, pero puede leerse a duras penas. Está rayado, intervenido, casi como símbolo del conflicto que se teje adentro.

Pasaron casi cuatro años desde que se adjudicó la licitación pública nacional para desarrollar una miniciudad turística en ese sector, pero una disputa sin resolver con la comunidad mantiene paralizados los emprendimientos.

“Las tierras no las vamos a entregar porque no tenemos por qué hacerlo”, afirmó el lonco Gabriel Cherqui, sobre las 14.000 hectáreas que reclaman y de las cuales 720 estarían afectadas a la urbanización.

El referente mapuche relató que el relevamiento territorial puesto en marcha por la ley 26.160 está “parado en Buenos Aires”, pero también reconoció que “la provincia no quiere entregar las tierras del istmo, como pasó también con los Campo Maripe, por intereses económicos y de explotación”.

Las organizaciones que compraron loteos, mientras tanto, aguardan una “decisión política” del gobernador Omar Gutiérrez para poner fin al conflicto.

“Estamos absolutamente desilusionados. Esto fue parte de una licitación nacional, hemos hecho inversiones, puesto mucho esfuerzo y las autoridades todavía no pueden sacar a la comunidad”, dijo el secretario general de ANEL, Juan Benítez.

Calificó el pedido de los Kaxipayiñ como “un absurdo” porque planteó que “no estuvieron cuando se hizo la presa y tampoco en la licitación”. “Para nosotros quien está en falta es el gobierno con las organizaciones. ¿Qué es lo que vendieron? Hasta acá es casi una estafa. Tiene que haber un resarcimiento económico o de nuevas tierras”, agregó.

El coordinador de la Asociación de Profesionales de Neuquén (APN), Adalberto Manestar, coincidió en que “la solución depende exclusivamente del gobierno”.

“Nosotros participamos de una licitación que nadie impugnó, fuimos adjudicados. No tienen derecho los Kaxipayiñ a las tierras del istmo, eso está corroborado y nos lo comunicó el exgobernador Jorge Sapag en su momento. La solución de un conflicto como este es estrictamente del gobierno”, aseguró. “Río Negro” intentó durante varios días contactar al ministro de Seguridad, Jorge Lara, pero prefirió el silencio.

En el lugar no pudo avanzar ninguna edificación, como tampoco el tendido de servicios o la apertura de caminos. “Hace 15 días volvimos con las máquinas a trabajar y la comunidad no nos permitió el acceso”, dijo Manestar.

Mauro Pérez

Fiduciaria Neuquina autorizó el pago de 600.000 pesos a la contratista Lineu SA para que construya un destacamento policial en el istmo pero nunca se pudo iniciar la obra.