Sin fútbol, las canchas no resisten y presionan para abrir
Aunque en algunos lugares se autorizó el “metegol humano” y el entrenamiento físico, los complejos no llegan a cubrir los gastos. Los propietarios se unieron en los reclamos y dicen que la situación es insostenible. Amenazan con abrir sin habilitación.
Los dueños de canchas de fútbol se plantaron ante las autoridades y buscan abrir antes de fin de mes. (Foto: Archivo Mauro Pérez)
Así como muchas disciplinas retomaron la actividad paulatinamente desde el comienzo de la pandemia de coronavirus, el fútbol amateur es uno de los rubros que está parado y los dueños de los complejos de canchas solicitan una respuesta de las autoridades. Incluso amenazan con “abrir” si es que la semana que viene no los habilitan.
Sin dejar de adaptarse a los protocolos, su idea es empezar a funcionar a partir de noviembre. Esperan el visto bueno pero insisten en que esa es la fecha límite.
El “OK” para entrenamientos funcionales o, en algunas localidades, la especialidad “metegol” (con distanciamiento entre los jugadores) no alcanzan para cubrir los gastos y la necesidad de abrir es imperiosa.
Los datos a tener en cuenta
- 10.000
- pesos, aproximadamente, factura un complejo que alquila para clases funcionales. No alcanza para la tarifa de luz.
- 19
- categorías, con entre 18 y 20 equipos cada una, hay en la región entre 300 For Ever, Don Pedro y la Superliga del Valle.
En épocas normales, los torneos comerciales de fútbol 11 juntan miles de personas cada fin de semana. Dos de los más grandes de la región como el Don Pedro y el 300 For Ever proponen retomar con amistosos.
“Queremos empezar a trabajar con protocolos, necesitamos abrir con partidos amistosos para que los equipos vean cómo queremos hacerlo”, señaló Luis Muñoz, organizador del torneo 300 For Ever.
La propuesta es que los jugadores vayan al predio ya cambiados y puntuales. Cuando terminan abandonan el predio enseguida y la cantina estará cerrada.
“La situación económica es desesperante. Esta es la época de mayores gastos, por el riego y el mantenimiento de las canchas. Necesitamos arrancar antes de terminar el año porque enero y febrero son meses muertos por el calor”, aseguró Muñoz.
“No somos ajenos a la situación sanitaria, tenemos amigos médicos, conocemos lo que está pasando. Pero creemos que hay que convivir con esto, perder el miedo, siempre tomando los recaudos”, agregó.
Muchos abrieron el fútbol metegol pero lo juegan normal. No te podés estar escondiendo para jugar al fútbol como si robaras algo”.
Luis Muñoz, del 300 For Ever, recalcó que la necesidad de reactivar.
Para los complejos de fútbol 5, la realidad no es muy diferente. Sin los turnos de partidos, lo habilitado hasta el momento no es suficiente para sostenerse.
Los dueños de la cancha El Tano, en Neuquén, hacen hincapié en el horario. “Queremos trabajar un poco más tiempo. El último turno que podemos dar es a las 19, muchos trabajan y no pueden venir”, comentaron.
Sobre la modalidad “metegol”, indicaron que es “difícil reglamentarla” y que “hay que estar a cada rato fijándose que se cumpla el distanciamiento, la gente no se acostumbra y quedás propenso a que te clausuren”.
En Roca, los complejos solo pudieron contar con las clases funcionales ya que ni siquiera se habilitó la modalidad “metegol”.
“Tenemos empleados, alquileres, impuestos, servicios, no se aguanta más. Con las clases no se cubre ni la tarifa de luz”, contó Andrés Garrido, de Hay Equipo.
“Lo primero es volver a los partidos pero tampoco entendemos por qué no podríamos tener el buffet al aire libre si están habilitados los bares. No estamos en contra de eso, queremos que abra todo con los cuidados necesarios, llevamos 230 días cerrados”, añadió.
Los infectólogos dicen que el riesgo de contagio es con un contacto de más de 15 minutos en un lugar cerrado, eso no pasa en el fútbol”.
Andrés Garrido, de Hay Equipo de Roca, se apoyó en la opinión de los expertos.
“La única manera de recuperar es jugando. No nos dejaron hacer el metegol humano. Hay enojo, son muchos meses sin ingresos”, expresó Gonzalo García Tauro, del complejo La Chacra, también en Roca. “No hay concordancia, nos decían que no porque se comparte la pelota pero en tenis y pádel se hace”, agregó.
Ante esta realidad, los propietarios se unieron en los reclamos a las autoridades y solicitan respuestas antes de fin de mes. Todos coinciden en que sin “picados” no hay forma de subsistir.
En La Masía apuestan por el autocine y no piensan en volver
Otro de los torneos más importantes de fútbol amateur en la región es el que se realizaba en el complejo de 12 canchas de La Masía, en Fernández Oro.
A diferencia de la mayoría de los propietarios de este tipo de predios, su dueño, Guillermo Biló, aseguró que no organizará partidos en el mediano plazo aunque se de la habilitación debido a la situación sanitaria.
“Es un riesgo muy alto abrirlas, no se puede pasar por alto que se junta mucha gente, es una responsabilidad muy grande. Yo no voy a abrir aunque habiliten. Hay gente que la está pasando mal”, afirmó.
“Mi idea es que subsidien los costos de los complejos o se den créditos a largo plazo. No quisiera que haya contagios en mi predio”, agregó.
Es muy complejo, es triste porque mantener las canchas tiene un costo muy alto. Me afecta mucho pero no voy a abrir”.
Guillermo Biló, de La Masía, discrepa con la mayoría de dueños y no apura la vuelta.
En La Masía, desde mediados de octubre funciona un autocine. Biló indicó que no es algo que salve la rentabilidad del predio, pero se piensa como una alternativa segura para estos tiempos.
“Es una puesta en escena que involucra muchas personas, es algo nuevo, que no habíamos vivido nunca. La gente de producción de eventos es quién organiza”, contó el propietario.
Relacionándolo con el fútbol, Biló consideró que “aunque habiliten las canchas la gente no va a ir en gran cantidad, hay mucho miedo”, ya que al autocine, a pesar de ser seguro, las funciones no colmaron la capacidad.
Comentarios