Sindicalista denuncia que lo secuestraron en la puerta de su casa
Pablo Micheli, secretario general de ATE y adjunto de CTA, dijo que no se trató de un secuestro al voleo sino que tenían identificación de quién era. Señaló que no podría atribuir la intimidación a su postura ante el conflicto entre el gobierno y el campo.
El secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Pablo Micheli, denunció hoy que un grupo de desconocidos lo secuestró «en la puerta» de su casa, ubicada al suroeste del conurbano, y le advirtió: «No hinches» y «dejate de joder».
«Me dijeron: 'vos venís con nosotros. A vos te queremos, vos sos sindicalista de ATE'. Sabían todos los datos de mi familia», comentó. Micheli es a la vez secretario adjunto de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), que ayer no asistió orgánicamente al acto gubernamental en la Plaza de Mayo encabezado por la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
«Puede ser que se aproveche toda este revoltijo y confusión que vive el país para amedrentar», confió el sindicalista y advirtió que «no quisiéramos que esto se generalice, porque así empezamos con la Triple A en los años 70 y despues terminamos como terminamos en la Argentina».
El gremialista, en diálogo con radio Continental, relató que «me secuestraron en la puerta de mi casa y dejaron en claro que sabían el nombre de mi esposa, mis hijos, no eran un secuestro al voleo sino que tenían clara identificación de quién era, y me alertaron que no hiciera denuncia». «Si fue un robo, fue un robo hecho por profesionales, porque estaban armados y sabían lo que hacían, no estaban ni drogados ni borrachos, eran tipos bien vestidos en una cuatro por cuatro», añadió.
Micheli detalló que «se llevaron mi auto, un Ford Focus que me asigna el sindicato como secretario general, y me devolvieron las tarjetas de crédito ni me me llevaron al cajero automático». Cuando los entrevistadores le preguntaron si creía que se trató de una intimidación, contestó: «Pareciera que sí» y arriesgó que «con el revoltijo y confusion que hay en el pais, por estas marchas y contramarchas, también puede ser que se aproveche esta situación para amedrentar». «Está claro que yo tengo una posicion clara respecto a esta situación: no estoy ni con el campo ni con el Gobierno. Hay que resolverlo con el diálogo» manifestó, pero de todos modos señaló que lo ocurrido «no podria atribuirlo a esa cuestión».
Fuente: DyN
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