El tereré quiere ganarle al mate en el verano

Caminar por las costas del río Limay en Neuquén implica ver cómo grupo de familias, amigos o incluso personas que van solas llevan un termo y el característico mate que hasta a veces se suplanta por un vaso. En épocas de altas temperaturas el cuerpo pide hidratarse y por eso los médicos recomiendan tomar mayor cantidad de líquido, pero sobe todo agua. Y el mate aparece automáticamente entre las variantes de hacerlo, sin embargo están quienes prefieren evitar lo caliente y optan por un refrescante tereré.

Si bien no existen datos oficiales que distinga qué eligen tomar los neuquinos, “Río Negro” hizo un paneo y entre 20 personas consultadas se estableció que en los balnearios un 50% prefiere el mate y el otro 50% el tereré. Pero un dato no menor es que los más jóvenes son quienes optan la infusión fría porque lo consideran “más rico” para llevar al río.

“Nosotros en el verano tomamos tere, no hay otra opción, lo hacemos con agua saborizada, jugo en polvo o incluso hasta con gaseosa. Hace mucho calor y el agua caliente no nos ayuda a refrescarnos que es lo que venimos a hacer en el río” comentó Gabriela, quien frecuenta el río junto a su marido.

Por su parte, quienes no abandonan la costumbre del mate afirmaron que “es de rutina, una costumbre y no se suplanta por ninguna otra cosa similar”.

Ahora bien, por qué el tereré se instaló en la sociedad de los argentinos pese a ser una bebida ancestral paraguaya a base de yerba mate, agua y mucho hielo. “En Paraguay se toma tereré a cualquier hora del día y de la noche, pero en horas de la mañana se le agregan hierbas silvestres refrescantes y medicinales, que en idioma guaraní se conoce como pohã ro’ysã” explicó Marcos Guaraya Aquino , quien vive en el país hace 8 años.

Entre los motivos que explican su consumo se destacan la elevada temperatura que conspira contra el bienestar del cuerpo por eso se lo consume en el verano. “El tereré no se toma como lo hacen acá, y es refrescante no porque sea sobre todo frío, pero en sí el tereré lleva hierbas. Le ponemos plantitas, como menta, jengibre, hojas de maracuyá, raíz de coco que recién salen porque en definitiva tienen beneficios a la salud” explicó Aquino.

A pesar de que su origen no está claro y la discusión con Brasil se hizo presente, la mayoría opina que es una bebida heredada de los indios guaraníes. Incluso a finales de 2010 el tereré fue declarado patrimonio cultural de Paraguay por una ley del Congreso de dicho país.

Lo cierto es que la costumbre se modificó, los neuquinos lo prefieren con jugo y para muchos es una buena opción para llevar al río durante el verano, aunque el mate calentito no le deje paso libre.

En febrero de 2013 se resolvió que el tereré forme parte del Código Alimentario Argentino. En efecto el mate frío, junto a la yerba mate elaborado con palo con bajo contenido de polvo, fue incorporado al Código, según lo Publicado en el Boletín Oficial.

La medida se dispuso a través de una resolución conjunta, la 43 y 59, de la Secretaría de Política, Regulación e Institutos del Ministerio de Salud y la Secretaría de Agricultura del ministerio respectivo.

Esas resoluciones otorgan un plazo de 180 días para que las empresas elaboradoras de yerba mate puedan adecuar sus sistemas de producción y comercialización a la nueva normativa alimentaria.

“Nosotros en el verano tomamos tere, no hay otra opción, lo hacemos con agua saborizada, jugo en polvo o incluso hasta con gaseosa”.

Gabriela frecuenta con su familia el río Limay.

“En Paraguay se toma tereré a cualquier hora del día y la noche, pero en la mañana se le agregan hierbas silvestres refrescantes y medicinales”.

Marcos Guaraya Aquino, paraguayo que vive en el país hace ocho años.