Sorpresivo «manejo» con la firma del convenio petrolero

BUENOS AIRES (ABA).- Las Cámaras empresarias hidrocarburíferas y la Federación sindical del sector, firmaron un convenio que habilita un aumento salarial para los empleados de la industria del petróleo y el gas.

Sin embargo, el Secretario General de la Federación Sindical del Petróleo y el Gas Privado, Guillermo Pereyra, le dijo ayer a este diario que algunas discrepancias hicieron que se postergue la suscripción del documento para el próximo martes.

«Está todo cerrado…-expresó un vocero sindical- «que suerte que no vamos a tener que discutir con los «gallegos» por un tiempo».

Mientras revisaba la letra chica del preacuerdo, un portavoz del sector empresarial sostuvo con un dejo de preocupación que el mismo significa un «logro de peso para los empleados del rubro petrolero».

El documento incluirá un incremento en los ingresos de los trabajadores del sector en el orden del 37 % (15 % regiría desde el mes pasado, 8 % acumulativo para mayo del año próximo, y luego dos tandas de aumentos del orden del 5 % para el resto de 2005).

El jueves, antes de ingresar al ministerio de Trabajo de la Nación, Pereyra subrayó que tal aumento equivaldría a un acumulativo del 102 % a partir de la pesificación desde comienzos de 2002.

Producto del conflicto con los trabajadores telefónicos, un clima de nerviosismo se adueñó de la jornada. Las horas pasaban y los empresarios y gremialistas venidos de la Patagonia se reunían en salas separadas en un marco de estricto silencio.

A última hora, se acercaron el ministro de Trabajo, Carlos Tomada con la secretaria de la cartera, Noemí Rial, para estampar sus firmas en e texto.

El secretario adjunto de la Confederación, José Altamirano, rescató lo obtenido en las paritarias durante los últimos tres años «en concepto de descuentos en medicamentos, ayuda escolar y elogió el «aporte extra» que incluye el convenio en cuestión en favor de las organizaciones sindicales.

El gremio petrolero alcanzó un preacuerdo que permitió levantar la medida de fuerza el jueves 18 de noviembre, luego de que Pereyra se entrevistara con el titular de Repsol YPF. El flamante presidente de la petrolera española, Antonio Brufau, mantuvo esa jornada una reunión con Pereyra en la que se selló un principio de acuerdo. El encuentro se realizó a instancias del vicepresidente de la empresa, Ramón Blanco Balín.


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