Sospechan que cometió una serie de asaltos estando prófugo

Guíñez tiene 35 años. Su rostro se oculta para no afectar futuras ruedas.

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Damnificados por distintos robos con armas cometidos en sus viviendas reconocieron al recientemente capturado Walter Guíñez como uno de los presuntos autores de los hechos. Guíñez, de 35 años, registra un frondoso historial delictivo, abonado con fugas y evasiones, y cumplía una pena de 11 años de prisión por varios delitos cuando la Justicia de Bariloche lo benefició con el régimen de salidas transitorias. En la segunda oportunidad que le permitieron salir de la cárcel, Guíñez ya no regresó, y de manera contemporánea comenzó a registrarse en el Oeste de la ciudad una serie de robos que, para los investigadores “tenían su sello”, por el carácter de las amenazas que sufrieron las víctimas, los actos de violencia y la utilización de precintos para inmovilizar a los damnificados. Ruedas pendientes Hasta el momento lo reconocieron los afectados por los asaltos ocurridos los días 4 y 8 de mayo pasados, en el kilómetro 5 de la avenida Los Pioneros y en el barrio El Trébol, respectivamente. Sin embargo, también lo someterán a ruedas de reconocimiento por otros hechos en los que figura como sospechoso. El primer episodio atribuido a Guíñez se inició a las 19 del 4 de mayo en una vivienda situada en el cruce del kilómetro 5,200 de Los Pioneros y el Paseo de Los Artesanos, cuando el propietario le franqueó la puerta a su cuñado, quien llegaba de visita, y esa circunstancia fue aprovechada por los delincuentes, que se introdujeron en la propiedad y redujeron al matrimonio y al ocasional visitante. La apremiante exigencia de dinero en efectivo que realizaban los asaltantes, a la vez que golpeaban con ferocidad a los integrantes de la pareja, hizo sospechar a las autoridades que el damnificado pudo haber retirado alguna suma de dinero de una entidad bancaria antes del suceso o bien, como también trascendió, que habría realizado una operación económica importante. Lo cierto es que no dejaron de golpear al matrimonio hasta que las víctimas les revelaron dónde guardaban sus ahorros, y se los llevaron. El otro hecho ocurrió cuatro días después en la ruta del Circuito Chico, en cercanías de la laguna El Trébol y a unos 100 metros de la ruta, cuando un vecino recibió la visita de un matrimonio y su hija. Al abrirles la puerta se sumaron en forma imprevista dos hombres armados que los amenazaron con sus armas de fuego y los obligaron a ingresar a la casa. Una vez en el interior, los delincuentes maniataron a las cuatro personas y se dedicaron a apoderarse del dinero, a saquear la casa y a cargar en la camioneta Mitsubishi de los visitantes el botín completo. El vehículo y la mayor parte de los elementos robados en esa ocasión fueron descubiertos por la Policía pocos días después, en montes cercanos al kilómetro 20 de la avenida Bustillo, oportunidad en que también resultaron detenidos dos hermanos de apellido Vidal Valenzuela.