“Soy el rival del Movimiento Popular Neuquino”

El referente del radicalismo dice que el gabinete de Sapag necesita oxigenarse.

ENTREVISTA: martín farizano, intendente de neuquén y candidato a gobernador

NÉSTOR MATHUS

nmathus@rionegro.com.ar

NEUQUÉN (AN) – El intendente Martín Farizano, candidato a gobernador por la UCR, dice que no tiene dudas que el MPN lo eligió como el principal rival y que no se equivocan. Pero que no es por su imagen o virtudes personales, sino porque ofrece un proyecto y una capacidad de construcción política que permitirá que la coalición que conduce en la ciudad se exprese también a nivel provincial.

Desde el MPN lo cuestionaron con dureza, pero respondió y contraatacó. Dijo que le preocupa el tono de la campaña porque apelan a la difamación.

¿Es compatible contratar vecinalistas como asesores, como hizo Sapag?

–Creo que no. En las vecinales hay un sinnúmero de dirigentes que son empleados municipales y no hemos hecho persecución política por eso. Lo que no corresponde es la cooptación abrupta cuando por decreto se designa 15 presidentes de vecinales como asesores.

¿Y este caso?

–Es evidente que estamos ante lo que ya es costumbre: cooptación de dirigentes a través del empleo público y nos pasa lo del hospital de Plottier. Hay un montón de gente pero sin calificación y no lo puede habilitar. ¡Si buscan asesores de políticas vecinales, alcanza y sobra con dos o tres…!

¿Recibe ATN de Nación?

–Cuando se utiliza la mentira como instrumento de campaña es difamación. En tres años no recibimos ni un ATN. De provincia no hemos recibido ni un peso fuera de lo que corresponde. Ni siquiera nos pagan los $30.000.000 de deuda y nos bicicletean. Sin embargo la deuda que teníamos con el ISSN nos obligan a pagarla en efectivo. La extorsión de provincia en no pagarnos tasas, impuestos y servicios lo hemos comentado, pero no hacemos campaña con eso.

¿Tiene plata en los bancos?

–No tenemos $100.000.000 depositados. Ellos estuvieron dos años para firmar el artículo 6 (del convenio de las prórrogas petroleras, recursos para obras municipales) y después nos piden que pasemos las obras por el Deliberante, donde las aprueban por goteo.

Obra pública

¿Y las obras en barrios?

–En la historia municipal no hay antecedentes del nivel de obra pública que se hizo en los últimos tres años.

El partido provincial lo eligió para criticarlo.

–No cabe ninguna duda, sino vean RTN.

¿Le preocupa?

–¡No! Seguramente el rival del MPN soy yo. Pero no porque sea magnífico o tenga virtudes personales, sino porque expreso una propuesta política que sí es peligrosa para ellos.

Y es el candidato.

–No soy un candidato carismático. Soy de perfil bajo. Recién hace diez años que estoy en la política y me hice conocido cuando fui candidato a concejal, a intendente. Pero tengo capacidad de construcción, que no es común en la provincia y en la zona.

Sapag es precandidato ¿Puede serlo Sobisch?

–Es probable.

¿Qué le sugiere?

–Soy muy respetuoso de las internas de otros partidos. Tengo responsabilidad institucional. Soy intendente y candidato a gobernador, actúo con prudencia y respeto.

El rival a vencer es el MPN.

–No hay ninguna duda. Sapag o Sobisch, más allá de las diferencia que puedan tener a nivel personal, de formación, tienen una misma trayectoria de compromisos, de vinculaciones. Si mira el gabinete anterior encontrará superposición de funcionarios. La provincia necesita una urgente oxigenación.

¿Cuándo se define el frente?

–Hemos acordado avanzar juntos. Estamos trabajando con Une, Frente Grande, una parte del ARI, el PS, organizaciones sociales. Estamos en condiciones de conformar un frente lo suficientemente importante, amplio. Este es el piso.

¿Y el PJ, con Nanci Parrilli, Gallia, Bertoldi lanzados?

–Estará, es fundamental, es un aliado histórico.

–¿Repetirán la fórmula UCR-PJ?

–Así lo creo. El consenso nos llevará a que armemos entre todos, no sólo con el PJ, la propuesta que tenga la mayores posibilidades de éxito.

Los diputados provinciales radicales lo tratan mal por la banca que dejó Cecilia Bianchi y pasó a un peronista.

–Habría que preguntarle a Bianchi cuál era su nivel de comodidad en ese bloque, esos compañeros que ahora pareciera que la extrañan. Son cosas de la política y los posicionamientos.


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