Trasladar a la Nación los logros en la provincia

Silvina Batakis (45 años) es economista, militante desde la juventud y actual ministra de Economía de la provincia de Buenos Aires.

En su ponencia, habla desde la trabajo en la provincia y refieriendo permanentemente a la gestión de Daniel Scioli.

“Buenos Aires es un país dentro de otro país. Por ello, Daniel está convencido de que podrá trasladar a la Nación el éxito de las políticas aplicadas en la provincia”, explica para iniciar su exposición.

A continuación, repasa las distintas políticas llevadas a cabo en Buenos Aires.

• Macroeconomía saludable. El éxito en Buenos Aires es el crecimiento económico, manteniendo las finanzas públicas en orden.

• Pymes, industria y trabajo. Las pymes son un actor crucial porque generan el 40% del trabajo. Por ello es esencial propiciar el empleo de calidad, incrementando el valor agregado, complejizando las cadenas de valor, con un perfil exportador y motorizando la innovación.

• Situación fiscal. La Provincia tuvo históricamente un déficit estructural, originado en la deficiencia de recursos de origen federal. El gran logro de la gestión de Scioli fue convertir el déficit en superávit, sin presionar sobre los salarios.

• Política impositiva. Se separó la política tributaria de la administración tributaria, permitiendo políticas como el impuesto a la transmisión gratuita de bienes o la exención de ingresos brutos a las pymes manufactureras.

• Financiación. Es clave la orientación del crédito a empresas. Actualmente el 72% de los préstamos del Banco Provincia se destina a las pymes.

• Desafíos. Sostener el crecimiento con inclusión social y la universalización de derechos como la Asignación Universal por Hijo, la moratoria jubilatoria y las paritarias. Fortalecer el mercado interno, mediante una política cambiaria adecuada. Es irresponsable decir que al otro día de asumir se va a levantar el cepo. Las reservas deben estar a disposición del sector productivo. Pero ello debe ser gradual, a medida que ingresan las divisas. Y esas divisas deben ser genuinas, no desde la especulación financiera.

Diego Penizzotto