Tres años sin resolver una licitación

VIEDMA (AV).- La licitación pública destinada a contratar un servicio regular de recolección de residuos en el Camino de la Costa ingresó ya en su tercer año sin poder resolverse. Al parecer, las pujas burocráticas están al orden del día, y a su vez, los oferentes detectaron anomalías en el expediente Nº 17.783 iniciado por el Consejo Provincial de Ecología y Medio Ambiente (Codema) en 2007. En mayo de 2009, la Secretaría General de la Gobernación declaró desierta la primera licitación desestimando las ofertas de las firmas Núñez, Federal y Cotravili como consecuencia de haber formulado una propuesta con un parque automotor que no se ajustaba a la normativa vigente. También rechazó al oferente Vuillermin por incompatibilidad laboral. Las demoras se extendieron por todo el año pasado, y recién los funcionarios rionegrinos pudieron abrir los sobres del nuevo pliego licitatorio el 10 de enero pasado. La firma Cotravili se volvió a presentar con 286.400 pesos por período de cobertura de dos años, Nervi con 216.000, Federal 237.500, Vuillermin con 204.000 pesos y Núñez con 213.600 pesos. Fue entonces cuando surgió la sospecha sobre que algunos oferentes podrían haber utilizado –supuestamente– nombres de terceros para ganar la licitación, y además los vehículos ofrecidos no se ajustarían –como lo señala el pliego de bases y condiciones– a la ley 3354. El 27 de julio pasado se volvió a reunir la Comisión de Preadjudicaciones nombrada por el Estado rionegrino y aconsejó desestimar a la firma Federal y declarar un “empate técnico” de propuestas entre Vuillermin y Núñez sin resolver una impugnación presentada por Nervi y sin tomar en cuenta la supervisión de la Fiscalía de Estado. El expediente se completó el 3 de agosto con un pronunciamiento inclinándose el empate técnico en favor de Vuillermin, a lo que Nervi volvió a impugnar por no cumplirse con los pasos administrativos en Fiscalía. A partir de ese momento, las actuaciones quedaron nuevamente paralizadas.

Actualmente hay varios oferentes que pelean el servicio en un proceso que ha tenido varias idas y vueltas.