Tres muertos en pocos años

ZAPALA (AZ)- El soldado voluntario Néstor Leandro Paz pasó a engrosar la lista de muertos en circunstancias accidentales dentro de guarniciones militares neuquinas en los últimos años. El 4 de septiembre de 2009 Gastón Cheuquel, un voluntario de 23 años que prestaba servicios en el Regimiento 21 de Las Lajas, murió al recibir un disparo accidental de un compañero, José Alberto Almendra, quien se encontraba limpiando el arma. Eran amigos de la infancia. El año pasado el Tribunal Oral de la capital neuquina absolvió a Almendra argumentado que había sufrido una “pena natural”, por el dolor que le produjo la pérdida de su entrañable amigo. El Tribunal interpretó que no existió intención alguna de lastimar a Cheuquel y tuvo en cuenta tanto las pericias como el propio relato de Almendra. “Uno de los datos salientes del proceso fue que ambas familias permanecieron unidas durante el debate. Eran amigos desde antes y les tocó vivir juntos esta tragedia”, explicó una alta fuente del fuero federal consultada por “Río Negro”. En tanto, el 24 de mayo del año pasado otro joven soldado voluntario del Regimiento de Infantería de Montaña 26 de Junín de los Andes falleció como consecuencia de un disparo que habría salido del arma de un compañero de guardia y que a primera vista habría sido percutida de forma accidental. La víctima, Juan Ramón Pérez tenía 23 años e ingresó a la guardia del hospital de Junín de los Andes con un tiro en la cabeza. Este caso estaría próximo a ser ventilado en juicio oral pero, a diferencia de la muerte de Cheuquel, habría algunos elementos que no permitirían la configuración de una condena por “pena natural”.