«Un consejito del gobernador influye sobre los jueces», dijo Ruminot

CENTENARIO (ACE y AN)- «Todos sabemos que un consejito del gobernador puede influir muchas veces en la decisión de los jueces», dijo ayer Sergio Ruminot después de entrevistarse con Jorge Sobisch.

El padre de la docente asesinada dijo que el mandatario asumió el compromiso de poner los medios a su alcance para lograr el esclarecimiento del crimen.

Sergio Ruminot y su esposa se reunieron ayer con Sobisch en Casa de Gobierno para hablar del caso de la docente asesinada en junio de 2002. En noviembre pasado, una Cámara Criminal absolvió a los dos imputados, acusó a los policías de plantar pruebas y le recomendó a la Jefatura que tome medidas «para que este escándalo no vuelva a ocurrir».

«Hemos visto muy buena predisposición del gobernador, que estaba bastante informado del caso de nuestra hija, y se comprometió a poner todo lo que esté a su alcance para que se esclarezca», señaló Ruminot tras la entrevista. «Lo ví como una persona muy sensible hacia el dolor ajeno», agregó.

Reveló que en un momento de la charla, Sobisch hizo llamar al ministro de Seguridad, Luis Manganaro, de quien depende la Policía. Le ordenó poner toda la ayuda del gobierno a disposición de la familia.

Si bien dijo entender que en la teoría el Poder Judicial es el que tiene que examinar la causa, con independencia del político, Ruminot fue claro al señalar que «todos sabemos que un consejito del gobernador puede influir muchas veces en la decisión de los jueces».

El caso se encuentra actualmente en el Tribunal Superior de Justicia, porque la fiscalía y la querella apelaron el fallo absolutorio.

El padre de la víctima opinó que ese fallo se debió a «un pase de facturas de los jueces a la policía».

Adujo que en su momento hubo «una descalificación tan grosera que hizo el juez Castro hacia la actuación de la policía (en el procedimiento), y lo mismo me ratificó el juez Badano -con quien se reunió ayer por la tarde- de que ellos actuaron en base al mal procedimiento que hizo la policía». Lamentó que «a nosotros nos tocó ser las víctimas de esto, lo cual me parece aberrante».

Señaló que a través de sus abogados apelaron la sentencia «porque consideramos que hubo un error gravísimo por el cual se han dejado dos asesinos sueltos, que desgraciadamente andan en nuestra localidad como si nunca hubieran hecho nada, cuando todos sabemos que positivamente son los autores del crimen».