Un Marcos implacable tomó la posta en la general de quads
La exigente octava etapa fue dominada por el menor de los Patronelli.
Dakar.com
El bicampeón impuso un ritmo demoledor en la octava etapa, que finalizó ayer en Belén.
Marcos Patronelli fue implacable en la octava etapa del Dakar que se largó en Salta y terminó en Belén, logrando una cómoda victoria que le permitió superar a su hermano Alejandro en la punta de la general de los quads.
El menor de la dinastía ganó su segunda etapa en fila, escoltado por Ale, sellando otro histórico doblete. Fue tercero el sudafricano Brian Baragwanath.
La etapa tuvo un recorrido de 393 kilómetros. Fue la primera en el actual Dakar que se realizó sobre arena y con altas temperaturas.
El sector estuvo dividida en dos tramos y en el último la navegación tuvo un papel fundamental.
Los Patronelli, al comando de los Yamaha Raptor, sabían que la etapa que terminó en Belén era muy importante para el futuro de la prueba y acertaron con su planteo.
En las dunas los hermanos se movieron con mucha firmeza, lo que le permitió otro 1-2, el segundo en la 38ª edición del Dakar, sino también conseguir una gran ventaja con sus principales rivales.
Al superar el Control de Paso 1, los bonaerenses se afianzaron en la etapa, Marcos continuó primero y Alejandro pasó al segundo lugar por delante del ruso Sergei Karyakin.
En el CP2, los hermanos se mantuvieron adelante separados por sólo 1m 15s, mientras que el nuevo tercero pasaba a ser Lucas Bonetto a 3m 54s.
Marcos no levantó su ritmo completó el tramo de velocidad superando a Alejandro, por 5m 42s. Tercero finalizó el debutante Baragwanath, a 6m 05s. El sudafricano, sin tener el nivel de las primeras etapas, demostró que es uno de los pocos que puede plantearle pelea a los argentinos, que empezaron a imponer su ley en la parte decisiva del Dakar.
Cuarto se metió el peruano Alexis Hernández, a 9m 17s, y quinto Bonetto, quien no pudo mantenerse y resignó varios lugares, quedando a 9m 56s.
“Fue una etapa tremenda, exigente, con mucho calor y demasiada navegación. Los últimos 60 kilómetros lo hicimos juntos. Empezó el verdadero Dakar, no tengo dudas”, comentó Marcos después de depositar su quad en el vivac de Belén.
Alejandro, quien nunca pierde su buen humor, reconoció que “cometí un error, que me costó casi cinco minutos. Paré para esperar a Marcos y resulta que pasó por otro lugar, no lo vi y tuve que salir a recuperar”.
También afirmó que “después encaramos la parte de arena, con mucho calor. Por momentos, fue insoportable, pero completamos el tramo con un buen ritmo y los quads en condiciones para encarar lo que falta”.
En la general, el menor de los Patronelli es nuevo líder superando a su hermano por 2m26s. Está tercero Hernández, a 32m 50s.
Los “reyes de los quads” edificaron una diferencia que en un Dakar no es decisiva, pero si muy importante como para pensar en lo que se viene hoy en Belén, con la novena etapa, nuevamente del tipo maratón.
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