Un raid fuera de casa que será determinante

Cipolletti viaja a Madryn mañana. Mario Barros le dijo que no otra vez.

Laura Frank

CIPOLLETTI (AC).- Los golpes se suceden para un Cipolletti que a esta altura debería tener más puntos que los escasísimos 4 que cosechó en cinco presentaciones en este atípico Federal A. Sufre al albinegro. Porque las cosas en la cancha no salen, por la salida de Domingo Perilli, por las lesiones y porque se nota cada vez más lejos la chance de volver a la soñada B Nacional después de “penar” durante 13 años en esta divisional. El viernes, el ahora equipo de Arnaldo Sialle experimentó una mejoría, que fue más anímica que futbolística. Lejos de la anodina versión mostrada cinco días antes en Cutral Co, propuso, generó situaciones y por momentos arrinconó a la CAI. Es cierto, también sufrió porque aún no está demasiado ajustado eso de defender con tres hombres, pero también lo hizo cuando estuvo parado con cuatro en otros partidos. El ímpetu y las ganas de salir de la crisis generaron un aliciente hacia afuera de la cancha. También que el equipo haya marcado dos goles en un partido, algo que no conseguía desde el debut contra Independiente de Neuquén. Kevin Guajardo, el revulsivo, el que siempre tuvo la llave para romper con las líneas defensivas del rival, también quebró con una extensísima racha de goleadores “secos” en el albinegro. El plantel partirá hacia el sur y en Madryn se jugará ante el puntero Brown buena parte de sus aspiraciones. El miércoles tendrá su primera presentación y el domingo se las verá con el Deportivo de esa ciudad. Allí, en Chubut, Cacho Sialle podrá trabajar sin presión y a puertas abiertas con un plantel que se llevó un amargo empate de local ante la CAI (2-2), pero que demostró espíritu para escaparle a tantos fantasmas. No fueron pocos los golpes que sufrió Cipolletti en las últimas semanas. Magros resultados, la salida de Perilli, las graves lesiones de Facundo Ávila y Ángel Prudencio (se perderán todo el torneo), la baja de Marcos Lamolla, algunos “aprietes”. Eso sí, los demás equipos tampoco se sacan diferencias y la realidad es que las chances aún se mantienen nítidas. El viernes, cuando apenas iban unos minutos del primer tiempo, el arquero Nelson Schomberger fue en busca del balón, se torció la pierna, cayó y el alma se les congeló a integrantes del cuerpo técnico y dirigentes. El exDefensores de Villa Ramallo estuvo unos minutos en el suelo, rengueó hasta el final del PT y después se recuperó. Durante estos días el cuerpo médico deberá trabajar con él casi exclusivamente, para mejorar ese esguince de rodilla, sabiendo que Alexander Vázquez, su suplente, no tiene experiencia para afrontar este momento. A la vez, los dirigentes se moverán para conseguir otro “1”. Las bajas de Prudencio y Lamolla (operado de apendicitis) también generaron un fuerte dolor de cabeza. Ante la CAI, Guajardo fue el mejor y Ricardo Chavarri experimentó una mejoría (sobre todo por la actitud para correrlas todas), pero hay falta de gol, aún sabiendo que Sialle mandó tres delanteros de arranque (con Weisser). Por eso, los directivos llamaron a Mario Barros, quien arregló hace poco en Centenario para jugar el Torneo del Interior. El Obelisco, un atacante tan decisivo en el arco de enfrente como particular para tomar decisiones para su carrera, quedó en contestar. Pero ayer, 24 horas después del ofrecimiento, volvió a decir que no. Los tiempos se acortan y la seguidilla de partidos de visitante (Brown, Deportivo Madryn e Independiente de Neuquén) suena determinante. Sialle trabajará y habrá que ver si mantiene el 3-4-3, ambicioso y peligroso a la vez. Al albinegro le quedan 27 puntos por disputar, está a cinco de la cima y clave será meter un triunfo afuera de casa.

Guajardo fue decisivo cuando se movió como media punta.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios